Sanfermines se prepara para combatir las agresiones sexistas que empañaron las fiestas del pasado año
07 jul 2017 . Actualizado a las 15:24 h.Pamplona pone en marcha nuevas medidas para luchar contra las agresiones sexistas en estas fiestas de San Fermín. Las denuncias por este tipo de agresiones se multiplicaron por cuatro en el 2016 y los expertos consideran que aún quedan muchas por registrar. Este hecho hizo que los sanfermines centraran la atención sobre este tema en la opinión pública, sobretodo con el caso de una violación grupal perpetrada a una joven de 18 años, el más grave de los denunciados. Además, otras 18 mujeres denunciaron abusos y agresiones sexuales.
El cambio del protocolo ha estado motivado por las innumerables y multitudinarias manifestaciones ciudadanas que se han producido desde los días posteriores a las violaciones. «El año pasado pasamos por una situación especial, una situación muy dura y que marcó también un antes y un después», afirma Joseba Asiron, el alcalde de Pamplona, al diario El País. «La profunda, la enorme movilización que hubo el año pasado el 7 de julio los días sucesivos en las calles de Pamplona, llenando plazas, es una forma de decir que ya estamos hartos y hartas, ya es suficiente. Además, reconoce que «esas movilizaciones y la ciudadanía movilizada colocaron a Pamplona en la punta de lanza de la lucha contra los ataques sexistas a nivel del Estado».
Protocolo de actuación
Al igual que ocurrió otros años, el Ayuntamiento de Pamplona ha puesto en marcha una campaña de sensibilización y un protocolo con los que pretende declararse ciudad libre de agresiones sexistas. El dispositivo policial se compone por 500 agentes más que el año pasado, y se aumentará el control en las zonas en las que se registraron más incidencias en este tipo de agresiones.
A través de una denuncia la víctima pone en marcha la actuación policial y será acompañada por dos personas -al menos una de ellas mujer- que la aconsejarán en cuestiones jurídicas y le prestarán apoyo psicológico y médico. Además, los colectivos feministas, que mantienen contacto con un equipo técnico de guardia 24 horas, cuentan con sus propios protocolos de actuación y proporcionarán casetas y teléfonos a los que también se podrá acudir.
Agresiones no identificadas
Las formas de violencia sexista son muy variadas y el objetivo es considerarlas y enmarcarlas dentro de la violencia estructural. Por ello, a pesar de que el anterior protocolo ya recogía todos los tipos de agresiones que se pueden producir, el nuevo incluye tres escenarios distintos. En el primer tipo se incluyen todas aquellas actitudes, como tocamientos o amenazas, que atenten contra la dignidad y libertad de la mujer. Estas son las agresiones más invisibilizadas y las que motivan la separación en tres tipos, puesto que se hace necesario evidenciar que ese tipo de comportamientos constituyen, también, una agresión sexual. El segundo y el tercero se reservan para agresiones consideradas de mayor gravedad como los abusos sexuales y los asesinatos sexistas.
El decálogo para informar sobre actitudes sexistas
Los medios de comunicación, como pieza clave en las campañas de sensibilización, han elaborado un decálogo sobre como elaborar informaciones sobre las agresiones sexistas:
- Las agresiones sexistas no son hechos aislados.
- No atribuir las agresiones a motivos erróneos que inducen a conclusiones equivocadas.
- Proteger a las víctimas por encima de otros intereses periodísticos o informativos.
- La fuentes oficiales sobre las «primicias».
- Buscar voces expertas que complementen nuestras informaciones.
- Incluir únicamente testimonios pertinentes.
- Evitar términos como «pasional» o «cuestión de celos».
- Prestar atención a las imágenes que ilustran la información así como a los pies de foto.
- Respetar la presunción de inocencia e informar del castigo impuesto.
- Difundir las iniciativas institucionales así como las acciones de respuesta frente a las agresiones.
La labor de los colectivos feministas
Sin duda, los colectivos de mujeres han sido un movimiento imprescindible para conseguir primero, las movilizaciones ciudadanas y después la respuesta de los ayuntamientos, que se han enriquecido con la experiencia y los protocolos que llevan a cabo.
