Tecnología para detectar y frenar el auge de opioides sintéticos

maría cedrón REDACCIÓN / LA VOZ

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Un estudio advierte que hay que estar en guardia ante la constante evolución de sustancias

29 ago 2018 . Actualizado a las 08:39 h.

«Dada la creciente epidemia de muertes relacionadas con las drogas y la frecuencia de nuevos opioides sintéticos, hay una necesidad urgente de revisar y restablecer los requisitos para las pautas y procedimientos de pruebas de toxicología clínica y post morten de rutina, además de desarrollar nuevas tecnologías para evaluar e identificar la potencia de los medicamentos». Esa es una de las medidas que resulta urgente acometer en Estados Unidos para frenar la que es «la mayor epidemia de muertes» que ha vivido el país, como apunta un estudio multidisciplinar difundido esta semana por el departamento de Justicia del Gobierno norteamericano, tras su publicación en el Journal of Analytical Chemistry.

Datos coordinados

No solo eso. El trabajo insta también a tener acceso a datos coordinados proporcionados por los diferentes agentes encargados de la lucha contra las drogas (médicos, fuerzas de seguridad...) sobre asuntos como el tipo de compuestos químicos que van incautando los agentes del orden hasta los principios activos de los fármacos hallados en los cuerpos de las personas víctimas de esta epidemia.

El objetivo es dar respuesta, cuanto antes, al auge de nuevas drogas. Pero no solo hablan de sustancias que están en el punto de mira como el fentanilo, causante de la muerte de celebridades como Prince o Michael Jackson. También de otros compuestos químicos que surten el mercado clandestino.

De hecho, más allá de haberse convertido ahora en el gran negocio de algunos carteles tradicionalmente dedicados a la marihuana, primero, y a la cocaína, la heroína o la metanfetamina, después, la web oscura es otra de las formas que tienen los consumidores de hacerse con este tipo de drogas, desde fentanilo a otros compuestos de nueva formulación.

Solo el año pasado fueron registradas en Estados Unidos 72.000 muertes debido a esta causa.