El iPhone XS y otras novedades que se esperan de la presentación de Apple

Agencias

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JOSH EDELSON | Afp

Los medios especializados dan por descontado que la compañía presentará este miércoles su nuevo smartphone y una nueva serie del Apple Watch

12 sep 2018 . Actualizado a las 08:19 h.

La multinacional estadounidense Apple celebra este miércoles 12 de septiembre su presentación anual de productos en la sede de Cupertino (California), en el que se espera que muestre su nuevo modelo del iPhone, según apuntan varias informaciones periodísticas.

Como suele hacer, el gigante estadounidense ha dado pocas pistas sobre la presentación planeada en la sede de Cupertino, Silicon Valley, pero como todos los años la especulación hace su trabajo. Todos los medios especializados en tecnología o economía como TechCrunch o Bloomberg dan por descontado que la empresa aprovechará el acto para dar a conocer su último modelo de teléfono, después de que en el 2017 sacase al mercado el iPhone X, a un precio de 999 dólares, lo que disparó el valor bursátil de Apple por encima del billón de dólares.

Los expertos auguran que se lanzarán tres nuevos modelos de iPhone, incluida una versión más grande del iPhoneX, presentado el año pasado, que podría ser aún más cara. Este modelo, diseñado para celebrar los diez años del teléfono inteligente, estaba repleto de innovaciones tecnológicas (reconocimiento facial, pantalla LED, entre otras cosas) y se vendió desde 999 dólares en Estados Unidos. La marca cofundada por el fallecido Steve Jobs también presentó otros dos modelos, el 8 y el 8 Plus. De acuerdo con la prensa especializada, el nuevo dispositivo se llamará iPhone XS y estará disponible en dos versiones, una de 5,8 pulgadas (14,7 cm) y otra de 6,5 pulgadas (16,5 cm), como ya viene siendo habitual en los modelos más recientes del teléfono.

TechCrunch incluso sugirió que una de las novedades del iPhone XS podría ser la incorporación de un puerto «Lightning», el sistema de comunicación normalmente usado por los productos de Apple para transmitir imagen y sonido y conectarlos, por ejemplo, a una pantalla de televisor o a un proyector. Otra de las características del nuevo iPhone según los medios es que podría estar disponible en color dorado, algo inaudito hasta la fecha.

Pese a que las ventas de iPhone retrocedieron un poco entre abril y junio, Apple vendió 41,3 millones de dispositivos. La estrategia de ofrecer productos de alta gama ha permitido a Apple aumentar al mismo tiempo el 20% de su facturación de teléfonos inteligentes, gracias a sus altos precios. A pesar de esta fuerte dependencia financiera con los teléfonos inteligentes, los inversores aún confían en la marca Apple, que superó a principios de agosto el umbral simbólico de un billón de dólares de capitalización bursátil.

«Apple no tiene nada que probar, excepto que quiere segmentar un poco más el mercado», dice el analista Bob O'Donnell, de TECHnalysis Research. «Tratará de ofrecer una gama más amplia de opciones», continúa. Con él coincide Carolina Milanesi, quien hace seguimiento a Apple en la firma Creative Strategies. Ella espera que Apple también presente un modelo «más barato», que podría decir un poco más sobre la estrategia de la marca. «Va a ser interesante ver cómo lo posicionan: si realmente se supone que es un modelo de entrada a la gama de productos, entonces tendrá que ser más barato» que los demás, estima, y considera un precio «alrededor de 600 o 700 dólares».

Además del nuevo modelo, también se espera que Apple una nueva serie de sus relojes inteligentes Apple Watch con la pantalla más grande, y una actualización del popular ordenador portátil MacBook Air.

La Keynote de Apple tendrá lugar sólo unos días después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, instase a Apple a producir todos sus componentes en el país para así evitar verse afectado por los aranceles que su Administración podría imponer a China en los próximos meses. «Los precios de Apple pueden incrementarse debido a los masivos aranceles que podríamos imponer a China, pero hay una solución con la que habría CERO impuestos y, de hecho, un incentivo fiscal. Hagan sus productos en Estados Unidos, en vez de en China», escribió Trump en su cuenta personal de Twitter. El día anterior, Trump había amenazado con imponer otros 267.000 millones de dólares en aranceles a China, lo que perjudicó la cotización en bolsa de la empresa californiana, cuyas acciones en el parqué de Nueva York cerraron a la baja.