«¡93 sacos de la pumarada de arriba!»: la viral conversación de una señora asturiana con un joven de Madrid

Dámaris Fernández Ponce REDACCIÓN

VIRAL

El proceso de tratamiento de la manzana y elaboración de la sidra en Asturias
El proceso de tratamiento de la manzana y elaboración de la sidra en Asturias MIGUEL RIOPA

La mujer confundió su teléfono con el de su hermano, del que pensó que le estaba gastando una broma

05 dic 2021 . Actualizado a las 12:15 h.

Toda historia tiene inicio, nudo y desenlace. Y la de esta señora asturiana no es para menos. Todo parte de una confusión por parte de la mujer, con su teléfono móvil. Ella estaba contenta tras ir a recoger las manzanas a la pumarada y quería contárselo a su hermano, lo que ella no sabía es que, en realidad, le estaba hablando a un joven que vivía en Madrid y que no entendía nada de lo que le estaba contando.

El joven ha decidido compartir esta historia en Twitter para demostrar que, tras una simple confusión, ha quedado una simpática historia detrás. La mujer le escribe, a su hermano, y le dice «mira cuántos sacos de la pumarada de arriba, ¡93 sacos!», a lo que el joven le contesta que «se ha equivocado de número». Pero la mujer sigue contándole que le dejó sacos bajo el hórreo. «Se ha equivocado de número de teléfono», le dice de nuevo el joven.

La mujer, pensando que su hermano le está gastando una broma, le contesta «yo tengo el número de siempre». Y el jovel le replica «yo a usted no la conozco de nada». La mujer no ceja y le dice «muchas gracias, pero yo a usted sí». Entonces David se empieza a preocupar también y le pregunta «¿a mí de qué?». «De hace 60 años», le contesta la mujer, que sigue pensando que habla con su hermano y que le está gastando una broma.

El joven le intenta hacer ver de nuevo que tiene guardado mal el número e insiste en que el es un chico «de 23 años», mensaje que lo acompaña de una foto suya como prueba. La mujer sigue creyendo que es una broma de su hermano:  «Eso quisieras tú».

También ella le envía una foro: «Hermano, ¿a qué no tienes esta foto de la familia?». El joven le insiste en que se está equivocando de número y de persona, pero la mujer insiste en que «la sangre, tenemos la misma». Él le explica que se llama David y vive en Madrid

La conversación queda ahí, aunque David ha confesado que hay más conversaciones del mismo tipo, hasta que «un día le escribí y no le llegaron los WhatsApp», por lo que el joven pensó que los hijos «bloquearon el número» o «cambió de teléfono». Ahora la echa de menos. «Me alegraba el día, la verdad».

El poder de Twitter una vez más ha actuado y ha conseguido que esta historia se hiciera viral y llegara desde Madrid a Asturias, concretamente, a la ahijada de la señora que estaba tras el móvil y que ha asegurado en un tweet que cuando lo abrió, su cara «fue un poema» puesto que ella no sabía de la existencia de esta conversación. No obstante, todo ha acabado con un final feliz y prometiéndose, la ahijada y David, que se mandarán productos típicos, entre ellos «la sidra» que saldrá de la famosa recogida de manzanas de 93 sacos.