La reforma de la ley del «solo sí es sí» fractura a la mayoría de investidura

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

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La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz; la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, y la ministra de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría, tras el Consejo de Ministros.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz; la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, y la ministra de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría, tras el Consejo de Ministros. J.J.GUILLÉN | EFE

ERC y EH Bildu se alejan del PSOE, mientras los socialistas suman a los partidos afines a Yolanda Díaz

11 abr 2023 . Actualizado a las 19:39 h.

La división entre los dos socios del Gobierno de coalición en torno a la reforma de ley del «solo sí es sí» no solo esta creando una brecha entre Unidas Podemos y el PSOE, sino que ha dado lugar a una nueva configuración de las alianzas de cada partido. La iniciativa tomada por la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, de poner en marcha su plataforma Sumar, tiene mucho que ver en ese nuevo escenario político.

Lo que hasta ahora era un bloque de investidura avanza hacia una división de la izquierda en dos frentes. Por un lado, estaría el que formarían el PSOE con Yolanda Díaz y los partidos que se han sumado a la plataforma de la ministra de Trabajo, y por otro el que conforma Podemos, que de momento mantiene la alianza y la unidad de acción con los independentistas catalanes de ERC y los vascos de EH Bildu.

La expresión más clara de esa nueva configuración es la reforma de la ley del «solo sí es sí». Podemos no ha cedido a las propuestas del PSOE, que ya presentó su modelo de reforma, que fue tomado en consideración por el Congreso gracias al apoyo del PP, y ha presentado sus propias enmiendas al plan de reforma, que son prácticamente idénticas a las que ya presentaron ERC y EH Bildu. El ala socialista ya ha avanzado que rechaza todas esas propuestas porque a su juicio «no solucionan nada» y no servirían para arreglar el problema de la rebaja de penas a cientos de agresores sexuales y la puesta en libertad de decenas de ellos. 

Aliados de Yolanda Díaz

Significativamente, ni Más País, el partido liderado por Íñigo Errejón, ni Compromís han presentado enmiendas al texto propuesto por el PSOE, lo que implica que dan por buena la reforma que plantean los socialistas. Tanto Más País como Compromís son aliados de Yolanda Díaz y se han sumado al lanzamiento de la nueva plataforma Sumar, en la que Podemos no está dispuesto a integrarse si no hay previamente un pacto de igual a igual entre la formación de Díaz y el partido liderado por Ione Belarra.

Podemos considera que, a pesar de las rebajas de penas que se están produciendo, la norma estrella surgida del Ministerio de Igualdad de Irene Mantero no necesita reformas de calado. Estiman que el planteamiento del PSOE de crear un subtipo penal para cuando la agresión sexual se produzca con violencia o intimidación supone sacar del corazón de la ley el consentimiento. 

Yolanda Díaz votará con UP

El partido morado tiene en este caso el apoyo de ERC y EH Bildu, que consideran también que la reforma del PSOE supone desvirtuar la norma. Ambos partidos rechazan por tanto el texto del PSOE, del que se muestran alejados por considerar que ha cedido a las presiones externas en esta cuestión. En la votación de la toma en consideración de la propuesta de reforma de la ley, tanto Más País como Compromís se abstuvieron, a diferencia de ERC y EH Bildu, el BNG y la CUP, que votaron en contra.

El plazo para la presentación de enmiendas se cerró el pasado lunes. Mañana, estas deberán votarse en la Comisión y, en teoría, sería el 20 de abril cuando la propuesta de reforma debería ser votada en el pleno del Congreso. El texto pasaría inmediatamente al Senado, que lo debatiría la semana siguiente. Si la Cámara Alta no introduce enmiendas, el miércoles 26 de abril la reforma quedaría definitivamente aprobada.

Todo este proceso pone a prueba la unidad de acción del bloque de investidura a poco más de un mes de las elecciones municipales y autonómicas.

El acuerdo entre el PSOE y Podemos parece ya casi imposible y Yolanda Díaz tendrá que retratarse de nuevo. Este martes anunció que votará en el mismo sentido que decida Unidas Podemos. «Yo soy una demócrata y, por tanto, emitiré el voto que decida el grupo parlamentario al que pertenezco», sentenció.

Los socialistas asumen que están en manos del PP para sacar adelante la reforma

Las posturas del PSOE y de Unidas Podemos, ERC y EH Bildu parecen irreconciliables, por lo que la aprobación de la reforma del «solo sí es sí» volvería a quedar en manos del apoyo del PP, tal y como ocurrió en el debate de la toma en consideración. Los socialistas tienen ya asumido que a pocos días de las elecciones municipales y autonómicas tendrán que retratarse junto al PP en la reforma de la ley. Pero la decisión está tomada porque el ala socialista del Gobierno cree que es mayor el daño electoral que produciría el que las rebajas de penas siguieran contándose por cientos y especialmente el hecho de que alguno de los violadores que han salido a la calle reincidiera en el delito sin que desde el Gobierno se hubiera hecho nada para al menos impedir que en el futuro los agresores sexuales se sigan beneficiando de la ley con rebajas de condenas y excarcelaciones.

El PP espera una llamada

Pero el PP no lo pondrá fácil. Su portavoz parlamentaria en el Congreso, Cuca Gamarra, afirmó este martes que esperan «la llamada del PSOE para abordar las enmiendas». «Una llamada que aún no se ha producido» precisó. Aunque está de acuerdo en el fondo, el PP ha presentado 14 «enmiendas técnicas» al texto socialista con «cuestiones que se ha detectado que tienen errores» y que, a juicio del PP, han de ser atendidas y habladas.