Un padre se tira al vacío abrazado a su hijo en un posible caso de violencia vicaria en Navarra
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La madre del menor había denunciado que a la hora de recoger a su hijo en el colegio, le informaron desde el centro que no se había presentado
08 nov 2023 . Actualizado a las 10:51 h.La Guardia Civil localizó a primera hora de este martes por la mañana los cuerpos sin vida del padre y su hijo de siete años a los que se buscaba desde este lunes por la tarde tras la denuncia interpuesta por la exmujer y madre del menor, al descubrir que su hijo no había ido al colegio, en Estella. Los cadáveres se encontraron en un lugar conocido como el Balcón de Pilatos, donde fue hallado el coche. Los investigadores ya descartaron que se trate de un hecho accidental y baraja varias hipótesis. La principal es que se trate de un posible caso de violencia vicaria —hacer daño a exparejas a través de los hijos— al considerar que la acción del padre fue intencionada. Los datos de la autopsia, conocidos en la última hora del martes, avalan esta posibilidad. Las conclusiones preliminares indican que el hombre, de 54 años, se arrojó al vacío abrazando a su hijo, de siete. Las necropsias realizadas en Pamplona, asimismo, han descartado que el niño muriese por asfixia o por estrangulamiento y también descarta la presencia de sustancias tóxicas en ambos cadáveres.
Ambos cuerpos presentaban traumatismos compatibles con la caída, que fue de unos 200 metros de altura, y el del niño en concreto mostraba menos lesiones, lo que indicaría que su caída habría sido amortiguada, posiblemente al ser envuelto por el cuerpo de su padre, según fuentes judiciales.
La pareja, separada desde hace algo más de dos años, es muy conocida en la zona. El lunes, el progenitor tenía que haber llevado a su hijo a la escuela. No lo hizo. A primera hora de la tarde, cuando la madre fue a recogerlo, descubrió que no se había presentado. El hombre, de 54 años y que trabajaba en la construcción, tampoco se había presentado en su empresa. Tras varias gestiones para localizar a ambos, infructuosas, presentó denuncia ante la Guardia Civil.
Amplio dispositivo
Se desplegó un amplio dispositivo por la zona entre la noche del lunes al martes. Participaron efectivos de la Guardia Civil, a los que se sumaron agentes de la Policía Foral, bomberos, y un grupo de recate técnico, con perros adiestrados. La búsqueda fue infructuosa hasta primera hora del martes, cuando un familiar del fallecido acudió a una zona próxima al balcón de Pilatos de Urbasa, un paraje escapado que frecuentaba el hombre. Encontró el vehículo abierto, con las llaves puestas y un teléfono móvil en el interior. Después un helicóptero de la Guardia Civil localizó los cuerpos del padre y del hijo en una zona de difícil acceso, con una caída de 200 metros de altura. Los agentes lograron recuperar los cadáveres, que fueron trasladados al Instituto Navarro de Medicinal Legal.
La noticia de la aparición de los cuerpos del padre y del menor provocó una enorme conmoción en Estella, localidad de la que eran originarios los fallecidos y la madre del pequeño, que regentaba un local en este municipio. Se convocó en el Ayuntamiento una junta de portavoces de urgencia, en la que se acordó decretar tres días de luto. También se celebró una concentración en señal de duelo, a la que asistieron decenas de vecinos de Estella y representantes de la corporación municipal. La alcaldesa de Estella, Marta Ruiz de Alda, reconoció el impacto que había provocado el suceso y mostró su apoyo y solidaridad a la familia de las víctimas.