Dos bomberos atrapados en el edificio que se incendió en Valencia: «Compañeros, hasta aquí llegamos. No entréis a por nosotros»
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Al darse cuenta de lo terrible de su situación tras verse rodeados de humo y llamas, los hombres se despidieron por radio del resto de su unidad
01 mar 2024 . Actualizado a las 17:28 h.La tarde del pasado jueves se generó un auténtico infierno en un edificio de Valencia. En cuestión de minutos las llamas lo devoraron todo y terminaron con la vida de 10 vecinos, entre ellos una bebé de 15 días de nacida y su hermano, de tres años. Dos de los primeros bomberos en desplazarse hasta el lugar encontraron un panorama desolador. Nada más entrar al edificio de viviendas situado en la calle Maestro Rodrigo del barrio del Campanar, se dieron cuenta de la magnitud de la tragedia. El humo lo inundaba todo y las llamas amenazaban con entrar.
«Compañeros, hasta aquí llegamos. No entréis a por nosotros». Esas fueron las palabras de despedida de uno de los bomberos que quedo atrapado en medio del fuego junto a su compañero, según recoge el diario Las Provincias. Estaban seguros de que iban a morir y así lo avisaron al resto del equipo con voz tranquila, pese al infierno en el que se encontraban.
Al parecer, había orden de salir del edificio, pero los compañeros de los bomberos atrapados no se dieron por vencido y decidieron entrar para intentar salvarles la vida. Y lo consiguieron en un rescate agónico.
Los bomberos de Campanar que se desplazaron rápidamente hasta el lugar en donde se originó el fuego, coinciden en que pese a su probadísima experiencia nunca habían visto algo similar. El humo y el fuego el interior elevaron la temperatura casi hasta los 120 grados, por lo que ahí dentro se quedaron sin oxígeno.
Las botellas que llevaban solo tenían aire suficiente para unos 15 minutos. De ahí que los dos hombres que estaban atrapados se percataran rápidamente de que resultaría imposible escapar de aquel infierno. Es entonces cuando empiezan a relatar por radio lo que están viviendo y deciden despedirse de sus compañeros: «Hasta aquí llegamos. No entréis a por nosotros».
Pero del otro lado de la radio había una luz de esperanza. Fue un cabo el que decidió ignorar la petición de los atrapados y asumió la responsabilidad de adentrarse junto a otro compañero al edificio ardiendo. Afortunadamente sabía a dónde tenían que ir por lo que encontraron rápidamente al primero de los hombres, con tan buena suerte que mientras intentaban rescatarlo tropezaron por casualidad con el segundo bombero que se encontraba ya tumbado en el suelo, inconsciente, según explican en el periódico valenciano.
Así, en medio del caos, consiguieron salvar la vida de los dos hombres que habían entrado con la intención de ayudar a las víctimas. Decenas de personas fueron rescatadas en una noche agónica que quedará para siempre en la memoria colectiva.