Aragonès reta a Sánchez y condiciona la continuidad de la legislatura al referendo
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El candidato de Esquerra a la Generalitat asegura que nunca apoyará a Illa y que Puigdemont busca una solución personal
05 abr 2024 . Actualizado a las 05:00 h.ERC se apresta a defender hasta donde le lleguen las fuerzas su propuesta de referendo pactado con el Gobierno central en el marco de la Constitución. El presidente de la Generalitat y candidato a la reelección, Pere Aragonès, exhortó ayer a Pedro Sánchez a sentarse a negociar su plan, a pesar del nulo apoyo recibido, ni siquiera entre las huestes independentistas. «Tiene un compromiso firmado», sentenció Aragonès en una entrevista en la cadena Ser, en la que apeló al acuerdo firmado entre ERC y el PSOE para la investidura. El dirigente catalán respondió así a las palabras de Sánchez horas antes desde Catar rechazando cualquier posibilidad de acordar un referendo de autodeterminación para Cataluña, y le recordó que el pacto que lo mantiene en la Moncloa incluye abrir una «nueva fase del proceso de negociación para escuchar las propuestas de futuro de Cataluña y la relación con España».
Tras reconocer que su propuesta «no es ninguna novedad» —de hecho, es la misma que la planteada en el 2013 al entonces Gobierno de Mariano Rajoy—, instó a Sánchez a presentar la suya para «resolver el problema de soberanía» en Cataluña. «También nos dijeron que la amnistía no era posible, y ahora se está tramitando […]. Al final, todo es cuestión de voluntad política», apostilló.
«Trolear al PP siempre apetece»
Sobre la amnistía, Aragonès confirmó su presencia el próximo lunes en la comisión del Senado creada por el PP para abordar la ley. «Como independentista, republicano y de izquierdas, trolear al PP siempre apetece», afirmó el presidente de la Generalitat, que quiere evitar con su presencia que los populares conviertan la Comisión General de las Comunidades Autónomas en un «aquelarre» contra la amnistía. «Se tiene que defender la amnistía en todas partes, aunque sea en un terreno hostil», aseveró Aragonès, que volverá a la Cámara Alta por segunda vez, después de haber defendido la amnistía a los encausados del procés el pasado mes de octubre. Entonces, pronunció un discurso de unos diez minutos y se marchó sin esperar a las intervenciones de los once presidentes de las comunidades gobernadas por el PP.
En los micrófonos de la Ser, el candidato de ERC se presentó como la mejor garantía para continuar con la «estrategia negociadora» de Cataluña con el Estado, en contraste con un partido como Junts, que, «diez meses atrás, afirmaba que negociar era renunciar, y que ahora negocia con el presidente del Gobierno».
En esta línea, Aragonès no perdió la oportunidad de cargar contra su principal oponente en la carrera por la Generalitat, el expresidente Carles Puigdemont. Para el republicano, lo que busca el líder de Junts es «una restitución personal», que no será «institucional», ya que tanto Torra como él mismo son «presidentes legítimos» elegidos por el Parlamento, incluso con los votos de los posconvergentes.
Respecto al candidato del PSC, Salvador Illa, volvió a poner tierra de por medio, al asegurar que «no habría continuidad en el proceso de negociación» con el exministro al frente del Ejecutivo catalán, porque «entre dos que piensan lo mismo [en referencia a Sánchez] no hay nada que negociar». Y con Puigdemont «no lo sabemos, porque dice cosas distintas». En cualquier caso, eludió pronunciarse sobre la posibilidad de gobernar de nuevo con Junts, porque aspira «a obtener el máximo apoyo y depender lo mínimo de otras formaciones políticas que no han demostrado la responsabilidad que se requería en determinados momentos», valoró.