Los médicos llaman a la huelga

Susana D. Machargo REDACCIÓN

ASTURIAS

Un cartel anuncia una huelga médica en un centro sanitario del Principado.Un cartel anuncia una huelga médica en un centro sanitario del Principado
Un cartel anuncia una huelga médica en un centro sanitario del Principado

El Simpa denuncia una ristra de incumplimientos y señala que la negociación con el Principado está «totalmente estancada»

20 may 2016 . Actualizado a las 18:49 h.

Al Sindicato Médico de Asturias (Simpa) se le ha acabado la paciencia y llama a la huelga. La tregua que había concedido al nuevo equipo de la Consejería de Sanidad para negociar los temas pendientes de la pasada legislatura ha expirado. El sindicato acusa a la administración de utilizar una estrategia basada en la dilación, en la que constantemente reclama más tiempo para valorar y cuantificar. El resultado es que las conversaciones están «totalmente estancadas». Continúa habiendo incorporaciones precarias de facultativos, que firman muchos contratos al mes; la oferta pública de empleo (OPE) aún no ha salido pero se baraja la exigua cantidad de 100 plazas de especialistas, cuando en los últimos cinco años se han jubilados 472; no se ha resuelto el fracaso de los módulos de tarde; la carrera profesional sigue bloqueada... Este es el listado de agravios que los médicos citan para agitar el fantasma de la huelga.

Todavía no tienen más detalles. No se sabe ni cómo ni cuándo. Hasta el momento, solo han tomado la decisión. La sección de Atención Especializada del Simpa ha instado al consejo ejecutivo del sindicato a iniciar los trámites «para la convocatoria de una huelga médica, en los próximos meses». Tienen todavía en mente la huelga médica de 2012, que duró más de tres meses. De hecho, otro de los argumentos que utilizan ahora para justificar su decisión de convocar paros es «el incumplimiento sistemático del acuerdo de fin de huelga de 2012».

La amenaza es firme. Durante meses han barajado la idea, pero ahora ya han dado el paso. Recuerdan que, en los últimos nueve meses, han mantenido numerosas reuniones con diferentes ámbitos de la administración sanitaria sin ningún resultado satisfactorio. Responsabilizan directamente al Gobierno del Principado de bloquear las «legítimas reivindicaciones del personal facultativo».

Reivindicaciones médicas

Esas«legítimas reivindicaciones» que citan se refieren a acabar con las contrataciones en precario de médicos jóvenes que firman multitud de contratos cada mes y que, según el Simpa, terminan emigrando a otras comunidades en las que encuentran mejores condiciones de trabajo. El sindicato señala que la consecuencia directa de este éxodo médico es que los hospitales periféricos, como el del Oriente, tienen auténticas dificultades para cubrir puestos de especialistas como el de Pediatría. También está el conflicto por la OPE. Todavía no hay cifra oficial pero se baraja un centenar de plazas. A los representantes médicos, les parece «una cifra ridícula». Reclama, al menos, dos tercios de los 472 jubilados en los últimos cinco años. Esto supone, como mínimo, 354 puestos. Señala que la acuciante falta de profesionales está «deteriorando la calidad asistencial y aumentado la listas de espera».

Otro de los motivos de confrontación es la jornada laboral. El Simpa habla del «conocido fracaso de los módulos de tarde», incapaces de absorber la demanda asistencial. La solución, que en principio se iba a implantar con el inicio de 2016, no llega. Esa alternativa iba a ser unificar la jornada en todos los hospitales, con un horario de siete horas y media. Tampoco la carrera profesional está progresando. El sindicato señala que la Administración había prometido que el 1 de enero se implantaría el primer grado y que se valoraría la progresiva implantación del resto, en función de la disponibilidad presupuestaria. Esto tampoco se ha llevado a cabo.

Con todos estos temas en cartera, los médicos dicen verse abocados a la huelga. La del año 2012, de más de 100 días, aún está presente en la retina de los profesionales y de los propios pacientes que sufrieron las consecuencias.