¡Precaución en vacaciones! Los casos de robos en el hogar crecen durante el verano

Este verano los más afortunados cambiarán trabajo por placer, asfalto por mar, o calor por brisas pirenaicas. No obstante, nadie querrá que su casa haya cambiado cuando regrese, y aún menos encontrarse con un hogar desangelado. Más allá de la crema solar, sombrillas, una buena lectura o un par de esquís, los robos domésticos, desgraciadamente, son los otros protagonistas del verano. 

Un dato ilustrativo: en julio de 2015 se contabilizaron más 145 robos diarios en Madrid. Además, según el blog de la inmobiliaria Haya, durante el periodo estival los robos en casas aumentan un 25%: se producen aproximadamente 82.600 durante la etapa vacacional. Se calcula que en verano se produce un hurto cada 33 minutos, y que la fecha punta se extiende entre el 21 de julio y el 15 de agosto. Asimismo, el 69% de los robos tienen viviendas independientes por escenario, y las probabilidades de sufrirlo se incrementan en un 7% en el caso de vivir en un piso. Por regiones, Andalucía es la que recoge más incidentes de este tipo.

Se trata de datos que, no obstante, no nos ayudarán a evitar convertirnos en víctimas potenciales. Lo que sí que puede conseguirlo es seguir una serie de consejos que publica todos los años el Ministerio del Interior. Tal y como asevera el mencionado blog, «los tiempos cambian y los ladrones se modernizan, pero las medidas son prácticamente las mismas; eso sí, teniendo en cuenta más que nunca a las redes sociales». Con respecto a esto último, se suele recomendar no publicar que abandonamos nuestro hogar, pues nunca se sabe quién nos está leyendo. A continuación, se exponen otros consejos que seguro que serán de utilidad al veraneante.

Aunque suene a Perogrullo, conviene cerciorarse de que las puertas y ventanas han sido correctamente cerradas con llave. Por otro lado, a pesar de haber dejado nuestro hogar cerrado a cal y canto, es importante que la casa parezca habitada. Para ello dejaremos las persianas subidas o algún toldo desplegado, o le pediremos a algún familiar y/o vecino que se encargue de visitar de vez en cuando la casa y de recoger el correo. Por supuesto, tendría mucha coherencia suministrar un teléfono de contacto a esta persona de confianza. Otra buena idea es la de instalar un temporizador de luces, a fin de que estas se enciendan y apaguen a determinadas horas. Y por supuesto, es altamente recomendable no dar información sobre las vacaciones en redes sociales.

 Y ya que los ladrones suelen recoger cualquier objeto que encuentren a simple vista, sugerimos esconder a conciencia los objetos de valor. Guardar grandes cantidades de dinero o joyas en casa, no parece lo más recomendable. Para casos como estos, vendrá bien contar con un sistema de seguridad efectivo (alarmas, cierres o verjas).

 Por último, hay que recordar que siempre existe la opción de llamar a la Policía si lo consideramos necesario. En este sentido, indicios de un probable robo son marcas en puertas, ventanas y paredes. Y por supuesto, si llegas a casa y encuentras una ventana o puerta forzada, no entres y llama a la policía de inmediato.

---

---