Denuncian que se les adeuda la nómina de varios meses y alertan sobre la mala gestión que, a su juicio, desarrolla la concesionaria del servicio, Catering 45, a la que se le acaba de retirar un contrato de «seis millones de euros» en 75 comedores escolares de Murcia
18 oct 2023 . Actualizado a las 09:46 h.Las profesionales de cocina del ERA de Arriondas, empleadas por la empresa Catering 45, no pueden más. Estas trabajadoras irán a la huelga a finales de este mes, con dos nóminas sin cobrar y tras denunciar en repetidas ocasiones una mala gestión por parte de su empleadora y otras malas prácticas, caso de impagos a proveedores.
Los días «27 y 28 de octubre» tendrán lugar estos paros, como ha explicado la secretaria general de CCOO de Oriente, Humi Gutiérrez. Tanto el sindicato como las propias trabajadoras exigen una respuesta a la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar del Principado de Asturias y que le rescinda el contrato a Catering 45. Una empresa que, por cierto, parece ser reincidente ya que, según explican desde CCOO, también ha perdido el servicio en el centro juvenil de Sograndio y en la comunidad de Murcia se les ha retirado el contrato para gestionar nada menos que 75 comedores escolares por incumplimiento de contrato.
La representante de CCOO indica que el problema se viene enquistando «desde diciembre», si bien la empresa, que «cogió la concesión del servicio en 2017» ya empezó, a su juicio, dando muestras de mala gestión desde el primer día.
En este sentido, Humi Gutiérrez apunta que «el convenio refleja que los abonos de las nóminas tienen que hacerse entre el día uno y el cinco de cada mes», algo que «desde 2017 nunca se cumplió» ya que, según su relato, las profesionales del ERA de Arriondas han ido cobrando «a trancas y barrancas» desde el principio.
Sin embargo, destaca, «en enero la cosa empezó a ir a peor y en mayo la situación se volvió insostenible». Apunta que estaban afectadas «diez trabajadoras al inicio del conflicto y ahora quedan ocho, de las cuales dos están en situación de incapacidad temporal». Obviamente se ha producido una merma en la plantilla «porque en esta situación la gente no puede aguantar sin comer» y las profesionales que dejaron la empresa «se fueron en la mayoría de los casos con tres meses de sueldo por percibir».
Explica que, a causa de la mala gestión de recursos por parte de Catering 45, en ocasiones «hay dificultad para poder montar los menús como vienen diseñados por el departamento de nutrición del ERA», si bien el compromiso de las trabajadoras ha permitido que la atención a los usuarios no se resienta.
«Lo que se hace es sustituir un día por el otro, dependiendo del estocaje de productos que haya en el almacén, pero en todo caso es una comida bien elaborada y correcta para una residencia de ancianos», afirma y añade que el desarrollo del conflicto no va «en ningún caso en detrimento de los usuarios», que no están siendo desatendidos.
Por desgracia la situación no es sorprendente en el caso de una empresa que, como explica Humi Gutiérrez, también ha sido apartada del centro juvenil de Sograndio y ha perdido el contrato para gestionar 75 comedores escolares en la comunidad de Murcia, en ambos casos por el supuesto incumplimiento de las condiciones del contrato.
«En el centro de menores de Sograndio se inició el conflicto después del nuestro y ese contrato ya se rescindió», explica y añade que «hace poco en Murcia perdieron un contrato por un importe de unos seis millones de euros, precisamente porque no abastecían, la calidad del servicio no era la correcta y no se cumplían las condiciones».
En el caso del ERA de Arriondas, precisamente, la calidad del servicio se está manteniendo por la «sobrecarga de las trabajadoras que hacen encaje de bolillos con lo que tienen en el almacen o salen a comprar a los centros de proximidad, algo que han hecho muchas veces, productos básicos sin los que no pueden seguir».
En este caso la secretaria general de CCOO de Oriente explica que «lo primero que se hizo fue una reclamación a la empresa». «Nos pusimos en contacto con ellos en varias ocasiones y en un principio conseguimos que se fueran pagando nóminas, aunque fuera con retraso, pero ya en los últimos tiempos no nos contestan al teléfono ni al correo», apunta.
Posteriormente, ante el silencio de Catering 45, trasladaron el caso «a la dirección del ERA y a la consejería». «Desde abril tenemos su compromiso de rescindir el contrato», apunta, si bien lamenta que la actual es una «situación de emergencia», con «familias al borde de la pobreza, menores implicados, y facturas que no esperan porque haya habido elecciones o la consejería aún esté en proceso de organización».
Desde CCOO y la plantilla se han empezado a desarrollar concentraciones y ahora están convocadas dos jornadas de huelga «con la intención de ir a una negociación en el Sasec y por lo menos vernos la cara con la empresa». «No vamos a parar», insiste Humi Gutiérrez, que afirma que la plantilla y sus representantes llegarán «donde haya que llegar».
Gutiérrez aprovecha este conflicto concreto para hacer un llamamiento en general al Principado. Y es que, en su opinión, «tienen que tomar conciencia de que los servicios públicos no se pueden ceder al mejor postor», sino en base a cuestiones como «la calidad en el servicio y a la estructura que tengan esas empresas en nuestra región y en nuestras comarcas». «Estamos dando nuestros servicios públicos a compañías de fuera de Asturias y no podemos ejercer presión sobre ellas», lamenta.