Las fórmulas para evitar que la noche avilesina agonice

Noelía Rodríguez AVILÉS

AVILÉS

Fiestas temáticas, conciertos o djs son algunas de las propuestas que ofrecen los hosteleros para recuperar los clientes del ocio nocturno

05 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Viernes de antroxu. 4 de la mañana. Un grupo de cuatro amigos salen de uno de los dos bares que estaba abierto en el barrio de Sabugo y debaten a dónde ir. «Por aquí no hay nada». «¡Vamos a Quattro!» «Está cerrado» . Hace 15 años en el mismo sitio en que están, el cruce de la calle La Estación y Carreño Miranda, había que pedir permiso a la gente para poder avanzar un par de metros, de un bar a otro. La realidad de la noche avilesina de entonces nada tiene que ver con la de ahora, incluso cuando se celebra la fiesta más multitudinaria del año en la ciudad. Los locales se quedaban pequeños para acoger a todas las personas que querían celebrar carnaval en la villa. Este año las calles de Sabugo estaban desérticas y aunque sí había gente en alguno de sus bares, principalmente en los de El Carbayedo, la imagen nada tiene que ver con la de tiempo atrás. «El sábado estuvo bien, pero el viernes y el lunes flojo», reconocen hosteleros de ocio nocturno. Y eso que la programación de antroxu sacó a la calle a numerosas personas a la ciudad durante todo el fin de semana, tanto avilesinos como otros venidos de fuera de la ciudad. Pero no fueron a los bares. Y eso que desde hace un tiempo los hosteleros de la noche trabajan en alternativas para atraer clientela.

Lo ocurrido durante carnaval es la consecuencia directa de lo que se ve cualquier otro fin de semana en la ciudad: el ocio nocturno está de capa caída. Y mucho. Las razones son una incógnita para las partes implicadas, aunque es cierto que lleva ya así varios años. Los dueños de locales apuntan a la crisis económica, que hace que la gente salga menos y consuma menos. Los jóvenes aseguran que se van a Oviedo o Gijón los fines de semana porque en Avilés «el ocio nocturno en Avilés es nulo», en palabras de Pablo Vázquez, de 21 años. Para la gente de su edad Sabugo es un barrio en el que tomar sidras, el mismo que bullía a principios del nuevo milenio. «Algunos sábados en El Carbayedo hay ambiente», asegura. Este espacio es en el que ahora se concentra la oferta de ocio nocturna, en donde los bares de copas conviven con vinaterías. Aquí la clientela suele superar los 30 años.

Plaza’s lleva siete años abierto y es uno de los locales de referencia de la noche avilesina. «Llevamos haciendo eventos desde nuestros inicios», explica Santiago Albite, uno de sus copropietarios. En su sala han organizado monólogos, fiestas privadas, temáticas y conciertos, aunque reconoce que no siempre obtienen la respuesta esperada. Ofrecen un plus o algo diferente para animar a la gente a salir de casa. «Nos quejamos cuando no se organizan cosas, pero cuando se hacen no vamos», reconoce. «Cuando hacemos algún evento sabemos que es deficitario, y lo hacemos sabiéndolo», asegura. Las suyas son alguna de las fórmulas para tratar de reanimar la noche avilesina y evitar que agonice. De hecho no son los únicos que ven en los eventos, los musicales concretamente, una forma de animar la noche avilesina. Son varios los locales que en los últimos meses han incrementado la organización de conciertos. El propio consistorio se ha sumado a esta iniciativa con la intención de convertir a la ciudad en un referente musical del norte de España y lo hace con precios asequibles, para que el dinero no sea un problema.

«No podemos esperar que sea como antes»

Albite insiste en que «no es un problema sólo de Avilés, ha bajado la cosa en general» y apunta a dos motivos: «hace 20 años había más población» y, sobre todo, la crisis económica. Confía en que mejore cuando se dé la ansiada recuperación económica. Opinión similar tiene Ezequiel Dávalos, el propietarios del Populart, que se ubica a unos metros del Plaza’s y es otro clásico de El Carbayedo. Abrió sus puertas en 2003 y por aquel entonces era un bar cultural que organizaba exposiciones. Ahora se centra en el ocio nocturno apostando por djs. «He visto varias etapas y la clientela ha cambiado. No puedes esperar que sea igual que antes», asegura Dávalos. «Antes se salían más días, ahora se centran en sólo uno. Antes se tomaban más copas, ahora se piden muchas más cervezas», reconoce. No cree que los problemas por los que pasa el ocio nocturno sea un problema exclusivo de Avilés, pero reconoce que en la ciudad hay un hándicap: «no tenemos turismo de ocio nocturno, no tenemos gente que venga de fuera».

De hecho los jóvenes avilesinos tienden a disfrutar las noches de los fines de semana en Gijón u Oviedo, donde sí encuentran la oferta que Avilés no les brinda. La clientela que se puede encontrar en los bares locales suele superar la treintena, gente que gasta menos y suele pernoctar menos. Tienen diferentes hábitos de consumo que ellos mismos tenían 10 años atrás. Dávalos entiende que «no podemos hacer fórmulas mágicas» para recuperar la noche avilesina, pero también tiene claro que «no podemos esperar que sea como antes».