El diputado Pedro de Rueda preguntará mañana al consejero Genaro Alonso sobre las actuaciones previstas en las pinturas murales sobre cuyo deterioro ha alertado Lorenzo Arias
08 mar 2017 . Actualizado a las 17:48 h.El PP no quiere hacer del prerrománico asturiano la munición de «una batalla política» con el gobierno del Principado, pero tampoco se resigna a defender la conservación de un patrimonio que «lleva un milenio siendo importante» y de cuyo valor «nadie duda salvo el Principado de Asturias». Por ello, el diputado autonómico del PP Pedro de Rueda interpelará mañana con esos argumentos al consejero de Cultura, Genaro Alonso, en el pleno de la Junta General sobre las actuaciones urgentes en las pinturas murales de varios edificios del prerrománico asturiano.
Lo hará, según ha recordado hoy en rueda de prensa, «un año después» de apremiar al mismo consejero para la intervención en el panel conocido como «El Músico» del templo de San Miguel de Liño. De Rueda ya adelantó el pasado sábado esta iniciativa, tras la voz de alarma dada en La Voz de Asturias del especialista de la Universidad de Oviedo Lorenzo Arias sobre el estado de las pinturas en el templo citado y en los de San Julián de los Prados y San Salvador de Valdediós.
La iniciativa popular requerirá a Alonso actuaciones de «especial urgencia» para preservar «una de las partes más débiles y que más fácilmente puede desaparecer» del conjunto del prerrománico, a juicio de Pedro de Rueda; pero la demanda va más allá, puesto que el PP reclamará «un plan general, común». «Tomar de una vez en serio las pinturas murales es una buena manera de empezar», ha explicado el parlamentario.
«No hay transversalidad y no hay un concepto moderno de lo que es el arte y cómo se conserva», ha criticado el diputado popular, para quien, «más allá del enorme valor artístico y el enorme potencial turístico eternamente desaprovechado» se trata de «pedir medidas que salven una seña de identidad que nos une a todos los asturianos». En caso contrario, ha advertido sobre las pinturas en cuestión, «no es que las vaya a perder Asturias, es que la va a perder el patrimonio europeo y mundial». El conjunto del prerrománico fue declarado, en efecto, Patrmionio de la Humanidad en 1993 por la Unesco.