El restaurante As de Picas, que aún mantiene el récord fijado hace 10 años, se hace con la pieza pescada en el Eo
17 abr 2017 . Actualizado a las 07:55 h.9.500 euros. Ese es el dinero que el restaurante As de Picas de Gijón ha pagado por el campanu 2017, tras imponerse a otros diez establecimientos en una vibrante subasta celebrada en Cornellana, en la explanada de la Feria del Salmón. El pescador Alejandro Pérez, que capturó su pieza en el Eo, ha conseguido que su ejemplar de 5,790 kilos se pague a 1.640 euros el kilo. Fue el colofón perfecto a una mañana plagada de aficionados en los ríos.
La puja tuvo un precio de salida de 2.000 euros y los restaurantes fueron subiendo la apuesta de 100 euros en 100 euros. El pique entre el As de Picas y el Campanu animó el comienzo. Poco después entraba en directa competencia otro establecimiento, La Oveja Negra. En menos de 5 minutos ya estaba en 5.000 euros. Todo el proceso estuvo cargado de tensión y emoción, para los restaurantes y para un público que contenía el aliento. A partir de 6.500, la excitación y la curiosidad por saber si habría récord -fijado por el As de Picas en 18.000 euros en 2007- competían. De hecho, As de Picas y El Campanu fueron los dos que dispararon las apuestas. Ambos estaban con ganas. La incredulidad se abrió paso a partir de los 9.000.
La ceremonia de la subasta ha sido multitudinaria, la que más público ha congregado de los últimos años. Centenares de personas han abarrotado el recinto de la Feria del Salmón en Cornellana, que comenzó con un homenaje al exjugador del Sporting Enrique Castro Quini, que agradeció la distinción.
Once restaurantes habían anunciado con anterioridad su intención de participar en la subasta. Algunos son clásicos que ya se han alzado con la pieza en más de una ocasión. Otros se colaban por primera vez en esta singular cita, que año tras año despierta interés. La nómina de pujantes estaba formada por El Buche, de Salas; El Porcón, O'Carballeira, Casa Ramón, La Oveja Negra y Vinoteca Talismán, de Oviedo; As de Picas, de Gijón; sidrería El Campanu, con negocios en Cangas de Onís, Ribadesella y Oviedo; La Lonja, de Cudillero; y Casa Parrondo y Carlos Tartiere, de Madrid.