Bruselas expedienta a España por no castigar a Volkswagen tras el fraude

Cristina Porteiro
cristina porteiro BRUSELAS / CORRESPONSAL

ACTUALIDAD

VTELEVISIÓN

Alemania se negó a revelar información de sus investigaciones acerca del fabricante

09 dic 2016 . Actualizado a las 07:36 h.

La Comisión Europea sale de sus trincheras quince meses después del estallido del dieselgate. Y lo hace abriendo expediente a siete países miembros: España, Alemania, Reino Unido, Luxemburgo, Grecia, Lituania y República Checa. Bruselas los acusa de incumplir la normativa europea. En unos casos por negarse a multar a la empresa y en otros por no disponer de un mecanismo de sanciones «eficaces, proporcionadas y disuasorias».

El escándalo que sonrojó a la compañía automovilística Volkswagen también puso en evidencia la falta de control de los reguladores nacionales que pasaron por alto las trampas urdidas por el fabricante alemán para conseguir que los motores de sus coches superasen los test de emisiones en laboratorio.

No solo hubo negligencia, también dejadez y tolerancia con la compañía, según denunció ayer la comisaria de Mercado Interior, Elzbieta Bienkowska. España, Alemania y Reino Unido evitaron por todos los medios la imposición de multas tras constatar en el 2015 que Volkswagen había infringido la normativa comunitaria al usar dispositivos de desactivación que reducían la efectividad de los sistemas de control de emisiones. «Cumplir la ley  es el primer y principal deber de los fabricantes de automóviles, pero las autoridades nacionales deben garantizar que los fabricantes lo hagan», recordó la polaca Bienkowska.

La primera llamada de atención de Bruselas antes de acudir al Tribunal de Justicia de la UE va dirigida especialmente hacia aquellos países que, como Alemania y Reino Unido, no solo hicieron la vista gorda, sino que se negaron a colaborar con el Ejecutivo comunitario aportando datos de sus investigaciones nacionales. Un requerimiento legal obligatorio.

Indemnizar solo a EE. UU.

Tampoco es casual el momento que ha escogido la Comisión Europea para expedientar a estos países. La decisión llega después de que el gigante alemán decidiese indemnizar a los denunciantes estadounidenses, una opción que no contempla para los europeos por las pérdidas multimillonarias que tendría que afrontar en un mercado que consumió la mayor parte de sus automóviles trucados.

La única baza que le queda a Bruselas para lograr que la compañía hinque las rodillas es presionar a los Gobiernos de los Estados miembros. Algunos de ellos, como el alemán o el español, temen que una ofensiva contra la compañía se traduzca en la pérdida de miles de puestos de trabajo.

El Gobierno se escuda en que investiga a Seat y en la decisión que tome la Audiencia Nacional

El Gobierno ya tiene pensado lo que va a contestar a la llamada de atención de la Comisión Europea. «España abrió expediente informativo a Seat, empresa del grupo Volkswagen, y se pueden derivar, en su caso, sanciones».

Así lo avanzó ayer el ministro de Justicia, Rafael Catalá, desde Bruselas, a donde acudió a una reunión de ministros europeos del ramo. «Estudiaremos lo que nos pide la Comisión porque en España sí se han producido actuaciones», aseguró.

Sin embargo, este expediente está supeditado a la decisión que tome la Audiencia Nacional, que investiga a Volkswagen por presuntos delitos ligados al trucado de motores, desde el pasado julio, fecha de la imputación.

El expediente llegó a los tribunales españoles a raíz de varias denuncias.

De momento, hasta 80 gallegos se han personado en el Juzgado Central número 2 de la Audiencia Nacional como acusación particular contra Volkswagen. Los demandantes están representados por el bufete Balms, con sede en Vigo, uno de los 17 despachos de España que está personado en la causa y el único de Galicia.

Los propietarios proceden de Negreira, Santiago, Ourense, Salceda, y las áreas de Vigo y A Coruña, entre otras zonas. Reclaman un 30 % del valor del vehículo, según la gama, potencia y antigüedad. En toda España hay 500 personados.

De momento, de las siete sentencias emitidas por las Justicia española por el presunto fraude, seis absuelven a Volkswagen.