Una investidura obligada, pero sin fecha

T. N. REDACCIÓN / LA VOZ

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Paco Campos | EFE

La convocatoria del pleno es competencia de Ana Pastor, y todo apunta a que será en agosto, pero no en la primera semana

29 jul 2016 . Actualizado a las 07:13 h.

La ronda de consultas del rey ha servido para poner en marcha el proceso que desembocará en un nuevo Gobierno o en unas nuevas elecciones. Este dilema y la fecha en que se resolverá es lo único que queda por aclarar. Aunque la rueda de prensa de Mariano Rajoy sembró dudas sobre su voluntad de someterse al debate de investidura si no logra los apoyos necesarios, todo apunta a que sí lo hará. 

¿Está obligado Rajoy a presentarse al debate de investidura?

Aunque el líder del PP sembró dudas sobre si lo hará, no parece posible eludir ese compromiso tras haber aceptado el encargo del rey. El artículo 99.2 de la Constitución establece que el candidato propuesto por el monarca «expondrá ante el Congreso de los Diputados el programa político del Gobierno que pretenda formar y solicitará la confianza de la Cámara». Según los constitucionalistas y la interpretación que hace toda la oposición, del tenor de este artículo se deduce que el candidato no puede declinar el encargo del rey una vez aceptado formalmente. No es la opinión del PP. En cualquier caso, además del mandato constitucional, es políticamente inviable que Rajoy pueda desatender el encargo del rey. 

¿Hay un plazo para el debate de investidura?

No. La Constitución no fija plazo alguno para la celebración del debate y el artículo 170 del reglamento del Congreso solo establece que «una vez recibida en el Congreso la propuesta de candidato a la presidencia del Gobierno, el presidente de la Cámara convocará el pleno». Pero no marca límite alguno. De hecho, en el último intento, el de la fallida investidura de Pedro Sánchez, entre el encargo del rey y el inicio del pleno transcurrieron 27 días. Los plazos los negociarán directamente el aspirante y la presidenta de la Cámara, que es quien tiene la potestad exclusiva de fijar la fecha de convocatoria del debate de investidura. 

¿Cuál es el plazo razonable para el debate?

Rajoy reclamó «un plazo razonable» para negociar con el resto de los partidos. Aunque no haya un plazo legal, todo hace indicar que será a lo largo del mes de agosto. En la práctica, queda descartado ya que sea la próxima semana, como era la pretensión inicial del líder del PP. Por otra parte, este ha insistido una y otra vez en que no puede demorarse mucho la formación de Gobierno, porque de ello depende que se puedan elaborar los presupuestos para el próximo año y atender así a los requerimientos de Bruselas, porque de lo contrario habría seguro la multa que se acaba de evitar in extremis. Si se retrasara a principios de septiembre, podría ocurrir que en caso de que se llegara a unas nuevas elecciones, estas tuvieran que celebrarse en pleno período navideño. En consecuencia, el debate debería celebrarse entre la segunda y la cuarta semana de agosto. 

¿Qué posibilidades tiene Rajoy de ser investido?

Ahora mismo, ninguna. Y no parece que tenga muchas opciones de revertir la situación actual. Ciudadanos insiste en que no apoyará un Gobierno que tenga a Rajoy como presidente. Y si el voto favorable del partido de Rivera no garantiza la abstención del PSOE, sin él está absolutamente descartada. De hecho, Pedro Sánchez insistió ayer en que no se moverá del no. Y esto es lo realmente determinante, porque en la práctica la llave de la investidura de Rajoy solo la tienen los socialistas: sin su abstención, el candidato popular no podrá ser investido. Las opciones alternativas, como una abstención técnica generalizada de todos los grupos, ha sido descartada por la mayoría; o que se apoye en los nacionalistas catalanes, no la contempla el propio candidato. 

¿Qué pasaría si Rajoy fracasara?

Cuando se proceda a la primera votación de investidura, comenzará a correr el plazo de dos meses para que alguien lo consiga. Si nadie lo logra, quedarían disueltas automáticamente las Cortes y se celebrarían nuevas elecciones 54 días después. Si el pleno se celebrara la segunda semana de agosto, esos hipotéticos terceros comicios serían entonces el 4 de diciembre. Si fuera la tercera semana, las cita con las urnas se retrasaría al 11 de diciembre; y si fuera la cuarta, al 18 de diciembre. Estos plazos son fijos e inamovibles, por lo que la única fecha con la que se puede jugar es, en consecuencia, la de la convocatoria del pleno de investidura, una responsabilidad exclusiva de la presidenta del Congreso, Ana Pastor

¿Una investidura fallida lleva inevitablemente a nuevas elecciones?

No. Para ser investido, Mariano Rajoy necesitaría el apoyo de la mayoría absoluta del Congreso (176 diputados) en primera votación y de la mayoría simple (más síes que noes) en la segunda. Si fracasara, nada impide que pueda volver a intentarlo si el rey volviera a proponerlo. De hecho, hay quien cree que, una vez devuelto el castigo que Sánchez recibió en su frustrado intento de marzo pasado, los socialistas acabarían absteniéndose a la segunda en aras de la gobernabilidad. También cabe la opción de que lo intentara el propio Sánchez, quien de momento no lo ha descartado expresamente. Pero para lograr su objetivo necesitaría de un pacto con Unidos Podemos y con Ciudadanos, que hoy aún parece más inviable que tras el 20D.