La Voz de Asturias

SEO/BirdLife pide mejorar los ríos para evitar la disminución de salmones y truchas

Asturias

La Voz Oviedo
Cormorán

La ONG asegura que los cormoranes no son los responsables de la desaparición de las especies

05 Apr 2017. Actualizado a las 20:25 h.

SEO/BirdLife asegura que los cormoranes no son los causantes de la disminución en las poblaciones de peces de los ríos. Además, advierte que la reducción o eliminación de ejemplares de la especie contraviene la legislación europea y es ineficaz para aumentar el número de truchas y salmones. Según la organización, la solución pasa por mejorar el estado de los ríos. Por ello, pide que se enriquezca el hábitat en el que viven las últimas poblaciones de salmones ibéricos y otras especies, evitando la contaminación y reduciendo la presión sobre las capturas.

Frente a la «delicada» situación de las poblaciones de trucha y salmón antes del inicio de la temporada de pesca, SEO/Birdlife recuerda que los cormoranes no son una especie cinegética. Su caza no está permitida y solo se podría controlar la población «si no existe otra solución satisfactoria» y si se demuestra que la especie está causando «perjuicios graves».

La ONG afirma que no es la circunstancia del cormorán grande. También recuerda que la Directiva de Aves de la UE establece que no se puede considerar objeto de perjuicio la presencia de grupos de cormoranes pescando en las cercanías de una masa de agua, aunque se demostrase que consumen grandes cantidades de peces al día. El cormorán grande no es una especie reproductora en esta zona del norte peninsular; sino una especie invernante. Según datos del censo, la población invernante de cormoranes ha aumentado solo en Galicia. En Asturias, Cantabria y País Vasco la población invernante de la especie autóctona ha disminuido.

La organización asegura que las principales amenazas para las truchas y salmones son vertidos, contaminantes urbanos e industriales, extracción de áridos o modificación de cauces naturales; así como presas, saltos y otros obstáculos en los ríos, captación de agua para uso agrícola o urbano, o sobreexplotación por la pesca deportiva y la introducción de truchas alóctonas. El responsable de especies de la ONG, Nicolás López, advierte que la eliminación de cormoranes solo sumaría un problema más a la situación actual, ya que además de constituir una posible vulneración de la legislación, supondría un gasto público innecesario, que no solucionaría el problema. «La solución satisfactoria a la reducción de las poblaciones de peces no es matar cormoranes sino conservar nuestros ríos en el mejor estado posible», concluye el biólogo.

 


Comentar