Calidad por encima de la media

Antes de que en 2008 la selección española se quitara los complejos de épocas pasadas e iniciase uno de los ciclos más exitosos que se recuerdan en el fútbol internacional, Europa en general e Inglaterra en particular ya se había fijado en el talento de los jugadores españoles. 

Cesc Fábregas y Gerard Piqué iniciaron un camino que muchos siguieron después: aceptar la oferta de un gigante de la Premier y marcharse a Inglaterra en plena adolescencia para completar su formación lejos de casa. Fran Mérida, Miki Roque, Mikel San José, Antonio Barragán, Francis Durán... La lista es larga. Uno de aquellos jóvenes era Sergio Tejera. 

El último fichaje del Real Oviedo estuvo en el punto de mira de Real Madrid, Barça, Manchester United o Liverpool, pero fue finalmente el Chelsea el que consiguió llevarse a la perla del Espanyol. Formó parte del combinado nacional que disputó en 2007 salió subcampeón del Mundial Sub-17 de Corea. Aquel era un grupo de jóvenes talentos que lideraba la estrella del momento, Bojan Krkic. 

Además del canterano culé, había jugadores que se instalaron en la élite del fútbol europeo años después, tales como David de Gea, Fran Mérida, Nacho Fernández, Ignacio Camacho, Iago Falqué o Asier Illarramendi. En dicho equipo también estaba el ovetense David González. Ahora en el Marino, pasó por la cantera del Barça, jugó en el Cádiz y en el Málaga y también en el Real Oviedo Vetusta.

«Tenía muchísima calidad, como pocos en aquel equipo, y mira que había buenos futbolistas. De estos jugadores que te gusta ver, elegante y con una zurda tremenda», dice el asturiano. «Santisteban apostó por un doble pivote y Mérida adelantó su posición, jugando de mediapunta. Tejera de aquella también jugaba ahí y no tuvo tantos minutos. No se llevaba tanto tirar a los mediapuntas a las bandas y no le encontraron sitio», concluye David González.

Tras volver a España y jugar en Mallorca y Espanyol, el club perico le cedió en el mercado de invierno de la 13/14 al Alavés. En el club vitoriano coincidió con Fernando Macedo da Silva, Nano. Canterano de La Masía y con una amplísima trayectoria en el fútbol español, el gallego todavía sigue en activo, jugando en el Racing de Ferrol.

«La de Vitoria fue su primera experiencia en Segunda, le costó entrar en el equipo pero luego se adaptó rápido y fue importante jugando en el doble pivote», explica Nano. «Destaco su calidad, su visión de juego y esa gran zurda que tiene. Además es buen compañero», dice el centrocampista de su ex compañero.

Durante sus tres temporadas en el Nàstic, se puede decir que Sergio Tejera ha hecho muy buenos amigos. Uno de ellos es Juan Muñiz. El jugador asturiano no tiene dudas: «Tiene muchísima calidad, pocos como él en ese aspecto. Es un seguro con el balón, no la pierde. Es un refuerzo de lujo para el Oviedo».

Respecto a su posición en el campo, Muñiz tiene claro dónde se ve la mejor versión de Tejera: «De mediapunta no se encuentra tan a gusto. Puede llegar al área rival, pero no es eso. Lo pones de mediocentro y te abarca mucho, pero más arriba no, no es el típico jugador que espera el balón o que se desmarca a la espalda del contrario».

Sobre la dificultad del fichaje, el gijonés habla claramente: «Sé que tenía muchas ofertas, pero finalmente eligió el Oviedo y eso es una gran noticia para el proyecto de los carbayones. Él está muy contento de ir para allá». 

«Para mí es un jugador de Primera. En el fútbol ya se sabe que por unas cosas o por otras, suerte o falta de oportunidades, a veces no estás en la categoría que mereces. Lleva años jugando todo en Segunda y es de los mejores de la categoría», dice el asturiano.