El portavoz del Gobierno dice que promoverá en el parlamento que se dé «prioridad» a la reforma para cumplir el pacto presupuestario con el PP
26 abr 2017 . Actualizado a las 13:15 h.A la salida de la Junta de Portavoces de este lunes, la presidenta del PP asturiano, Mercedes Fernández, después de un largo debate entre los grupos para tratar de agilizar los trámites legislativos en la cámara autonómica, reclamaba al Gobierno urgencia para la aprobación de la le y que elevará de 200.000 a 300.000 euros la herencia exenta del pago del impuesto de sucesiones en Asturias. Una reforma mediante la cual se cimentó el pacto para la aprobación de los presupuestos del Principado para este 2017. Este jueves, el portavoz del Gobierno asturiano Guillermo Martínez señaló que la norma recibirá la aprobación del Consejo de Gobierno la próxima semana, después de recibir «el dictamen favorable del Consejo Económico y Social» y que además, una vez que llegue al parlamento, el Ejecutivo pedirá que se aborde de forma prioritaria porque «el gobierno cumple sus compromisos».
Martínez recordó que en la sesión del lunes se habría tratado de agilizar los trámites de «las iniciativas que ya estaban en la Junta» pero en todo caso reiteró que no sólo se aprobará la reforma de manera inmediata, en el próximo Consejo de Gobierno, sino que «nuestra disposición no es solo cumplir ese compromiso sino darle prioridad» en el debate de la Junta General.
El compromiso para elevar la exención del impuesto para los herederos directos se firmó en diciembre con el compromiso de aprobar la reforma en este 2017 y que entre en vigor de forma retroactiva. El pasado sábado se celebró en Oviedo una manifestación organizada por la plataforma que reclama la supresión de este tributo, no una reforma ni una modificación, sino su eliminación por completo y que sólo contó con la participación explícita de Foro Asturias. Tras esa concentración, la presidenta del PP señaló que la reforma del tributo es una demanda social «en la calle» y urgió a que «se priorice» porque el Ejecutivo asturiano sólo cuenta con el respaldo de su 14 diputados y «los pactos se hacen para ser cumplidos» y advirtió que el año próximo habrá que negociar de nuevo las cuentas regionales.
En los presupuestos de 2017 ya se recoge un aumento de la exención de los 150.000 a los 200.000 euros. Tras esta reforma aumentá a 300.000 con lo que, según los cálculos de Hacienda, apenas unos 200 asturianos al año tendrán que abonar el tributo. La consecuencia será también una merma de los ingresos de la comunidad, de unos 10,5 millones de euros al año.