Las notas del Sporting: Un tramite para el análisis

Dos semanas no da para nada. Lo que sucedió en Les Caleyes dice muy poco del nuevo Sporting. Fue un partido de pretemporada en mayúsuculas: frío, de piernas cargadas, caduco en talento y con fallos reiterados. Baraja se inventó dos onces, uno en cada tiempo y dibujó dos formaciones. El primer tiempo apostó por un 4-3-3 con un resultado irregular y en el segundo, con un equipo a priori más titular, en un 4-1-4-1 con Sergio por delante de la defensa y con Cerro y Traver en las bandas.

El ensayo incide en la necesidad de fichar, reivindicada, otra vez, por el técnico rojiblanco en sala de prensa. Da la sensación que a 19 de julio este Sporting tiene bastantes menos recursos que el eliminado por el Valladolid en play off. No tiene delantero, sigue igual de caduco de talento en la medular y le falta un líder en la defensa. Pero en el ambiente se observan algunos puntos positivos. Como proyecto nacido de cero, Baraja parece confiar más el fondo de armario y en la nueva remesa de Mareo. Cristian Salvador está aquí para quedarse y Cerro o Traver tienen talento para pensar en que van a ser importantes. 

Cuarenta y cinco minutos de Salvador evidenciaron que tiene hechuras de jugador. Está un escalón por encima en el plano físico, es ganador en los duelos y es un perfil de jugador que gustará en El Molinón. Ayer, en Les Caleyes, fue el mejor argumento defensivo en un primer tiempo extraño, donde el Lealtad, a base de balón largo, complicó la vida a Juan y Barba. El segundo periodo dejó la apertura de los fichajes, con Geraldes en el costado diestro, por un aceptable Molinero, Sousa en la zona de interior y con Santamaría como nueve, exhibiendo un perfil combativo y con acierto en el remate.

El primer partido, en la segunda semana de pretemporada, obliga a hacer un análisis calmado, aunque evidencia que este renacido Sporting necesita refuerzos y que, en vista de las declaraciones de Baraja, terminarán por llegar. El equipo que inicie la competición tiene que ser entonces, muy distinto al de ayer en Villaviciosa. 

El mejor: Isma Cerro

• Isma Cerro 7.  Con permiso de Cris Salvador, Cerro fue el jugador que cambió el partido. Pegado a la izquierda, en buena sintonía con Canella, con el que mezcló en distintas ocasiones, el extremeño enseñó su fuerte tren inferior, capacidad para asociarse por dentro, con una notable aparición en zonas de ataque. Será importante.

El 1 a 1 del equipo

• Fede Barba 5: Muy pocos minutos para dejar una imagen positiva, necesita ritmo.
• Hernán Santana 5: Muy discreto. No estuvo cómodo.
• Carlos Carmona 5: Entró en juego pero no fue decisivo, necesita juego asociativo para lucir.
• Pablo Pérez 5: Jugó pegado a la izquierda, no estuvo muy cómodo.
• Babin 6: Sin mucho trabajo, bien en el juego aéreo.
• Álex Pérez 6: Similar a Babin, mejoraron al tándem del primer tiempo.
• Canella 6.5: Muy participativo, cómodo, y ofensivo. Se gustó con Cerro.
• Sergio 5.5: Poca exigencia, tuvo menos trabajo que Salvador.

Los canteranos

• Christian Joel 5. Entró en el segundo tiempo y apenas tuvo trabajo. Necesita rodaje en el filial.
• Carlos Cordero 6: Empezó algo gris pero fue creciendo y dejó la asistencia del primer gol. Ganó confianza.
• Pedro Díaz 6: Mejoró al equipo en el segundo tiempo. 
• Pablo Fernández 5.5: Buen gol de nueve.

Fichajes y canteranos con ficha A

• Molinero 6.5: Bastante activo en el lateral diestro. Muy ofensivo, pero mal en el gol local, donde perdió la marca.
• André Geraldes 5: Asomó en ataque pero estuvo discreto
• André Sousa 5.5: Es un box to box. Un llegador. Mal como ejecutor del balón parado, bien llegando a zonas de remate.
• Juan Rodríguez 5. Sufrió en exceso y tuvo mala suerte en el gol.
• Nacho Méndez 5.5: De lo mejor en el primer tiempo pero algo solo en la creación.
• Cris Salvador 7: Muy buen encuentro del zamorano. Activo en la pérdida y fuerte en los duelos, vencedor en casi todos.
• Álvaro Traver 6: Dejó destellos de calidad, tiene desborde.
• Gorka Santamaría 6: No dio un balón por perdido, marcó un buen gol de cabeza pero demasiado en solitario