«El proceso está viciado, hay que empezar de nuevo»

a. b. madrid / la voz

ACTUALIDAD

MARTINA MISER

Miguel Ángel Soto, portavoz de Greenpeace, denuncia que EE.UU. se está llevando el gato al agua en la negociación

09 may 2016 . Actualizado a las 20:24 h.

Aunque la comisaria europea de Comercio calificó de «tormenta en un vaso de agua» el revuelo provocado por la filtración de Greenpeace, Miguel Ángel Soto, portavoz de la campaña en España, discrepa, y sostiene que la publicación de los documentos va a marcar un punto de inflexión.

-¿Hay forma de reconducir la negociación del acuerdo de libre comercio o habría que olvidarse de ella y comenzar de nuevo?

-Cuando las cosas se hacen mal, en secreto, ocultando información a la ciudadanía, el proceso está viciado. Hay que empezar de nuevo la negociación. Además, lo llaman tratado de comercio cuando la parte de barreras arancelarias es mínima y la mayor parte tiene que ver con la regulación, el reconocimiento mutuo de estándares, con temas no arancelarios que ellos identifican con barreras al comercio. Ya hemos empezado mal si las normas ambientales, los compromisos internacionales de lucha contra el cambio climático, el etiquetado o las denominaciones de origen se perciben como excesos regulatorios. Si legislar por el bien común es considerado una barrera para el comercio entramos en terreno peligroso.

-¿Qué nos jugamos en el TTIP?

-Mucho, porque el comercio tiene que tener en cuenta los beneficios, a la gente y al planeta. Es el enfoque del desarrollo sostenible el que defendemos, no el comercio visto solo desde la variante del interés de las empresas, como ocurre aquí.

-¿Por qué son tan importantes los documentos que ustedes han hecho públicos?

-Porque la democracia exige transparencia, participación y debate, y la sensación que teníamos es que se estaba excluyendo a la ciudadanía. Porque bajo la apariencia de algo relacionado con el comercio se están incluyendo muchos temas fundamentales. Y ahora se ha abierto el debate. Ya sabemos cómo está la negociación, aunque no sea el documento final, y EE.UU. se está llevando el gato al agua.

-¿En qué? ¿Qué les preocupa?

-Nos preocupa que al final se imponga el principio norteamericano de gestión de riesgos en lugar del europeo de precaución, algo clave en materia de salud y medio ambiente.