Iglesias no solo elimina a su rival en la izquierda, sino que maquilla su posible caída en votos a costa de su competidor
13 may 2016 . Actualizado a las 13:19 h.El acuerdo firmado entre el líder de Podemos, Pablo Iglesias, y el candidato de IU, Alberto Garzón, supone prácticamente la absorción por parte del partido morado de la coalición de izquierda, que quedará subsumida en las listas de una fuerza política mucho mayor en número de diputados. IU, que ha concurrido ininterrumpidamente a las elecciones desde el año 1986, y que integra en su seno al histórico PCE, fundado en 1921 y protagonista destacado de la transición a la democracia, queda así reducida al nivel de partidos de ámbito autonómico creados hace muy poco y que han creado confluencias con Podemos que, en algunos casos, como en el de En Comú Podem, pueden acabar teniendo un mayor número de escaños en el grupo del Congreso que los de Alberto Garzón.
¿Quién sale ganando en el pacto Podemos-IU?
El ganador claro en este acuerdo es Pablo Iglesias. El líder de Podemos se quita de en medio a su máximo competidor de las pasadas elecciones en la lucha por captar el voto de la izquierda. Y lo hace, además, cuando las encuestas apuntaban a un retroceso de Podemos y un notable crecimiento de IU. Iglesias logra así no solo maquillar su propio declive, sino sumar apoyos para su lista a costa de quien era su rival.
¿En qué lugar queda Alberto Garzón?
No existen precedentes de un pacto entre dos fuerzas políticas con representación en el Parlamento en el que el líder de una de las dos formaciones ocupe el quinto lugar en la lista por Madrid, por detrás de cuatro representantes del otro partido firmante. Ese, el quinto, es el puesto que ocupará ahora Alberto Garzón, que en las pasadas elecciones logró su escaño como número uno de IU por Madrid. Aunque su acta esté también garantizada ahora (Podemos obtuvo 8 escaños en Madrid el 20D), esa ubicación es un claro retroceso para un partido de ámbito nacional como es IU.
¿Es justo el reparto de puestos acordado?
IU obtuvo en pasadas elecciones 923.133 votos, algo menos de la tercera parte de los 3.182.082 que consiguió Podemos sin sus confluencias. Pese a ello, el reparto teórico de escaños es de 1 a 6. De las 52 circunscripciones, los candidatos de IU solo encabezarán tres listas menores el 26J: Ciudad Real, Palencia y Teruel. En este último caso, con el escaño repartido con Podemos a razón de dos años para cada partido. IU solo irá en segundo lugar en dos: Málaga y Álava. Los de Garzón ocuparán cuatro terceros puestos, en Sevilla, Zaragoza, Cádiz y Asturias, aunque en Zaragoza también será repartido con Podemos, de manera que el número dos, de Podemos, será diputado dos años y luego entrará como diputado el de IU, que es el tercero. En Madrid, sus candidatos irán en los puestos 5, 9 y 11, lo que implica que no tienen garantizado ni un solo escaño más que los dos que ya obtuvieron en Madrid el 26D.
¿Estará IU en el nombre de la coalición?
No se sabe aún. IU ha firmado el acuerdo sin tener garantizado siquiera que su nombre forme parte de la denominación de la coalición electoral. Algo que está por decidir. Sí se ha acordado que su logo este presente en la papeleta, pero al mismo nivel que otras organizaciones mucho menores, como Equo, que también entrarán en la coalición.
¿Tendrá grupo propio IU?
No. No puede tenerlo al no haber competido con Podemos en las elecciones. Será la primera vez en su historia que sus diputados estén a las órdenes de un líder que no es del partido. Aunque tendrán autonomía de voto, solo será para cuestiones que no formen parte del programa común.
¿Cómo se reparten las subvenciones por votos?
El reparto de la subvención que reciban por los resultados electorales se hará también en proporción de 1 a 6, a pesar de que en las pasadas elecciones la proporción en votos entre una y otra fuerza fue de 1 a 3,44.
¿Ha rectificado Pablo Iglesias sus duras descalificaciones a IU?
No. El líder de Podemos lanzó antes del 20D un ataque durísimo contra IU y contra el PCE, a cuyos dirigentes, entre los que se incluye el propio Alberto Garzón, calificó de «cenizos, tristones, aburridos y amargados» y de ser responsables «de que en este país no cambie nada». Garzón firma el pacto sin que Iglesias haya rectificado ni una coma de esos insultos, que afectan también a los militantes de IU que deben aprobarlo.
Un reparto que ignora la bajada de los de Iglesias que auguran los sondeos
El reparto de puestos en las listas y el de los escaños que se consideran garantizados se ha hecho sin tener en cuenta los sondeos publicados antes del pacto, que apuntaban a un acusado descenso de Podemos y un crecimiento considerable de IU. Las encuestas vaticinaban que, concurriendo en solitario, IU podría alcanzar hasta ocho escaños, al pasar del 3,7 % de los votos obtenidos el 20D al entorno del 5 %. Podemos, sin embargo, pasaría del 20,7 % obtenido con sus confluencias a un 18,5 %, lo que le haría perder casi 11 escaños. Sin embargo, el cálculo para el reparto se ha hecho teniendo en cuenta los resultados de las pasadas elecciones, por lo que a IU le corresponderían ocho escaños. Lo que significa que, a la luz de las encuestas, IU no gana nada con el acuerdo.