Podemos se niega a apoyar una petición a Maduro para liberar presos políticos
ACTUALIDAD
La formación de Pablo Iglesias se abstuvo mientras que IU votó en contra y llamó golpistas a algunos detenidos
09 jun 2016 . Actualizado a las 07:16 h.Batalla campal en el hemiciclo. La Eurocámara asistió ayer a un nuevo episodio de la pugna desatada entre los partidos políticos españoles a poco más de dos semanas de las elecciones generales. ¿La excusa? Venezuela. Populares, socialdemócratas, reformistas y liberales sacaron adelante con 501 votos a favor frente a 94 en contra y 73 abstenciones, una resolución conjunta para pedir al Gobierno de Nicolás Maduro la liberación «inmediata» de 2.000 presos políticos, la celebración de un referendo revocatorio este año y una solución pactada con la oposición para superar la «crisis humanitaria» y el bloqueo institucional que atraviesa el país.
El grupo de Izquierda Unitaria europea se desmarcó de la iniciativa acusando al resto de fuerzas de instrumentalizar la crisis en Venezuela y usarla como «arma electoral». Podemos evitó pronunciarse en contra, como sí hizo el año pasado, para no seguir generando un ruido que solo le puede perjudicar en las urnas. Se abstuvo en la votación, no sin antes reprochar a los grandes partidos (PSOE y PP) su afán por dejarlos al margen del acuerdo por exigir el respeto al marco constitucional del país latinoamericano. La postura de perfil que adoptó el partido de Pablo Iglesias no pasó desapercibida para los eurodiputados de Ciudadanos, que sacaron a relucir sus garras en cuanto percibieron la maniobra. «Podemos e Izquierda Unida han demostrado que son unos sectarios, amparando a Maduro como lo han hecho siempre», les espetó Javier Nart, disconforme con la posición ambigua adoptada por la formación morada. «Es lamentable», aseguró el popular Luis de Grandes.
Los eurodiputados de IU, en coalición con Podemos, sí votaron en contra de la resolución y cargaron contra el ala derecha del hemiciclo: «Esto solo contribuirá a echar más leña al fuego (...) Se está forzando a un Gobierno legítimo, se le está cercando para que tenga dificultades», denunció Javier Couso, quien acusa a la Eurocámara de intentar «desestabilizar a un país hermano», y de «distorsionar» la campaña electoral en España. La formación niega que haya «hambruna» en Venezuela y alude al «historial golpista» de presos como Antonio Ledezma o Leopoldo López. A 3.820 kilómetros del escenario de la batalla política, la delegación de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado encendía las alarmas. De las 116 peticiones de asilo recibidas en el 2015, la mayoría procedía de ciudadanos venezolanos.