El comandante está «desaparecido» desde el pasado 19 de abril
13 ago 2016 . Actualizado a las 21:50 h.Lejos de los focos que le han acompañado a lo largo de toda su vida. Así celebrará hoy su noventa cumpleaños el comandante, o sea, Fidel Castro. Refugiado en el entorno de su familia y sin ninguna información fidedigna sobre su estado de salud, convertido en la retaguardia de una revolución, la castrista, que no acaba de completar la apertura deseada por los cubanos con la restauración de la democracia, Castro se autodefine a sí mismo como un «soldado de las ideas».
Fidel, descendiente de emigrantes de la localidad lucense de Láncara, está «desaparecido» desde el pasado 19 de abril. «A todos nos llegará nuestro turno, tal vez sea de las últimas veces que hable en esta sala», vaticinó entonces ante los más de mil delegados que participaron en el VII Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC), vestido de chándal, sin su inseparable traje de camuflaje.
Acostumbrado a la clandestinidad, primero como luchador contra el régimen de Fulgencio Batista y luego para esquivar a sus enemigos, esos, que, según su propia leyenda, han intentado asesinarle no menos de 600 veces, Castro ha ido desapareciendo de la vanguardia revolucionaria de forma progresiva desde que sorprendiera al mundo traspasando el poder a su hermano Raúl hace una década.
Una enfermedad, cuyo alcance real nunca se conoció, le forzó a dar el inesperado relevo y, desde entonces, ha visto como Raúl Castro ha dado pasos en una dirección por él inimaginable: romper el bloqueo con Estados Unidos y realizar una apertura económica controlada dando oportunidades a la iniciativa privada.
A Fidel no le hacen mucha gracia los cambios. Desde su altavoz en el Granma, uno de los dos únicos periódicos que circulan en toda la isla, se ha convertido en el guardián de las esencias de la revolución, a pesar de que su influencia se ha ido debilitando con el paso de los años.
Su mujer, Dalia Soto del Valle, es su compañía permanente en una época en la que Fidel Castro ha tenido que despedir a alguno de sus amigos más cercanos, como el nobel Gabriel García Márquez o el expresidente venezolano Hugo Chávez.
Por su estado de salud, el Gobierno cubano no se ha atrevido a hacer público un calendario de actos. «Fidel entre nosotros» es el lema que se puede ver en carteles, como parte de la campaña gubernamental para homenajear su 90 cumpleaños y que tendrán conciertos, presentación de libros y actos políticos, entre otras actividades. Hasta un habano de 90 metros de longitud se confeccionará hoy en honor al hombre que avanzó que sería «el hombre más odiado de Cuba».