El número dos de Podemos contradice a Irene Montero, que vio a los «poderosos» atacando a su partido por el caso del portavoz en el Senado
08 nov 2016 . Actualizado a las 18:22 h.El número dos de Podemos, Íñigo Errejón, ha mostrado su desacuerdo con quienes creen que detrás de la información sobre la compraventa de una vivienda protegida de Ramón Espinar hay una conspiración. «Nunca creo en conspiraciones ni en manos negras», ha dicho. En rueda de prensa en el Congreso, Errejón ha respondido así al ser preguntado por las afirmaciones de la jefa del gabinete de Pablo Iglesias, Irene Montero, que ha señalado que los «poderosos» están intentando destruir a su partido con estas informaciones.
«Yo no tengo dudas de que hay poderes económicos fuertes a los que nosotros lo les hacemos especial gracia», ha añadido Errejón, si bien ha apostillado que no cree que detrás estén los «trabajadores del periodismo». Ha admitido, sin embargo, que los dirigentes de Podemos son tratados con «inusitada dureza» y un «rasero» más exigente que el que se aplica a otros representantes políticos. «Eso nos ha pasado a todos y a todas y lo asumimos como gajes del oficio», ha apostillado tras insistir en defender el trabajo de los periodistas, así como la obligación de Podemos de dar todas las respuestas «con toda naturalidad y responsabilidad».
En este sentido, Errejón ha llamado en cualquier caso a no comparar las «categorías» de sus adversarios y a intentar que Podemos no permanezca «encerrado» hablando de sí mismo o, «peor aún», hablando «de ellos» porque -a su juicio- eso supondría caer en «su trampa» y alentar la división interna. Por el contrario, piensa que quienes deben decir son los miles de madrileños convocados a las primarias de Podemos en Madrid, en las que el portavoz en el Senado, Ramón Espinar, y la portavoz del Ayuntamiento madrileño, Rita Maestre, compite por la Secretaría General.
No ha querido sin embargo pronunciarse sobre las declaraciones de uno de los miembros de la candidatura de Maestre, el diputado Emilio Delgado, quien ha cuestionado la neutralidad de la dirección y del equipo de Pablo Iglesias, que cree que está utilizando el asunto de la vivienda de Espinar para hacer campaña a su favor. «No me corresponde valorar las declaraciones de los diferentes miembros de las candidaturas. Como secretario político de todos, debo mantenerme escrupulosamente neutral y saludar la discusión fraterna de miles de madrileños», ha subrayado.
Se ha mostrado orgulloso de la alta participación en las primarias de Madrid y ha hecho hincapié en que la decisión corresponde a los inscritos, que deben elegir entre los diferentes modelos que compiten, sin que esto tenga «traslación estatal». Respecto a las críticas de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, que ha cuestionado que Pablo Iglesias viva en una vivienda de protección oficial que heredó de su familia, Errejón ha tildado de «ridiculez» y «pataleta» las palabras de la dirigente del PP y le ha reprochado que no hable de las viviendas públicas que su partido entregó a fondos «buitre».