Scotland Yard se lanza a la caza de la red yihadista que apoyó al kamikaze

Rosa Paíno
Rosa Paíno REDACCIÓN / LA VOZ

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PETER NICHOLLS | Reuters

Hay ocho personas detenidas, entre ellas el padre y dos hermanos del terrorista

25 may 2017 . Actualizado a las 08:11 h.

Scotland Yard se ha lanzado a la caza de la célula terrorista que apoyó a Salman Abedi, el británico de origen libio que mató a 22 personas, la mayoría niños y adolescentes, en el Manchester Arena. «Está muy claro que estamos investigando una célula», confirmó el jefe de la policía de Mánchester, Ian Hopkins. El balance de detenidos hasta la madrugada del jueves era de cinco en Mánchester y dos en Trípoli (Libia), entre ellos el padre y dos hermanos del suicida. Pero a lo largo de la noche la cifra varió. Fueron arrestados otros dos hombres en la zona metropolitana de la ciudad británica. Y la mujer detenida el miércoles en el norte de la ciudad fue puesta en libertad sin cargos.

La convicción de que los cómplices de Abedi siguen libres y que podrían intentar un nuevo atentado fue lo que motivó la decisión del Gobierno de Theresa May de activar el máximo nivel de alerta terrorista en el Reino Unido y el despliegue del Ejército. 

Redadas en Mánchester

El hermano mayor. Ismail, de 23 años, fue arrestado la mañana del martes cuando salía del supermercado Morrisons, en el barrio de Chorlton, situado a menos de medio kilómetro de la vivienda de su hermano Salman en Elsmore Road, una calle del vecino suburbio de Fallowfield. Los medios señalan que Ismail trabajó hasta enero en la panadería Park Cake Bakery, pero antes fue técnico informático en la mezquita de Disbury, donde ambos iban a rezar y su padre leía las plegarias.

Los registros continuaron ayer en el Gran Mánchester, entre ellos en un céntrico bloque de apartamentos próximo a la estación Manchester Picadilly. Tres personas fueron detenidas por la mañana y una cuarta por la tarde en la cercana localidad de Wigan. Esta última portaba un paquete sospechoso que fue analizado. Nada se ha filtrado de sus identidades ni del papel que pudieron haber jugado en la preparación y ejecución del atentado.

El artificiero

Solo el brazo ejecutor. La ministra de Interior, Amber Rudd, destacó que la sofisticación y planificación del ataque hace pensar que Salman no actuó solo. Uno de los objetivos es hallar al artificiero. La policía está convencida de que Salman no fabricó la bomba. En su piso encontraron un manual de química, pero ningún rastro de explosivos. El artefacto era sofisticado y potente, y fue hecho con precisión y cuidado, según revelan fuente británicas a The New York Times. La metralla fue colocada metódicamente para causar el mayor daño posible y tenía un detonador poco habitual. Los investigadores apuestan a que Abedi es solo el brazo ejecutor del atentado, lo que los medios denominan «la mula que portaba la bomba». Incluso se duda si el plan incluía su inmolación o simplemente el artefacto explotó antes de tiempo o lo accionó una tercera persona. Para defender esa tesis mencionan que en su reivindicación el Estado Islámico no habla como habitualmente de un mártir, sino de un soldado del califato. Además, los técnicos estudian que la carga explosiva estuviera en una mochila azul y no en un chaleco adosado al cuerpo de Salman.

Trípoli

Padre y hermano pequeño. El padre y el hermano pequeño de Salman fueron detenidos entre la noche del martes y ayer en Trípoli por una milicia que ejerce como policía antiterrorista leal, conocida como Rada, y que es leal al Gobierno de unidad respaldado por la ONU. A Hashem Abedi, de 22 años, le acusan de estar al corriente de la organización del atentado a manos de su hermano y de planear un ataque en Libia en nombre del Estado Islámico. El portavoz de la milicia libia confirmó la detención del padre, Ramadán Abedi, pero sin explicar de qué se le acusa. La familia había regresado ya a Libia, pero Salmany Ismail decidieron quedarse en Mánchester.

Viaje a libia

Cuatro días antes. Salman viajó a Libia hace tres semanas y regresó al Reino Unido cuatro días antes del ataque, según fuentes estadounidenses y un allegado a la familia Abedi en Trípoli. «Su padre quería que se quedara en Libia. Pero Salman insistió en regresar a Mánchester», dijo el allegado bajo la condición de anonimato a la agencia AFP. Los servicios secretos estadounidenses y británicos intentan determinar si Salman pudo reunirse con miembros del Estado Islámico o de Al Qaida en el Magreb. Rudd evitó confirmar las afirmaciones hechas por su homólogo francés, Gerard Collomb, sobre que probablemente también viajó a Siria. Dos personas que habían conocido a Salman Abedi en la universidad alertaron hace cinco años a la policía sobre su ideología extrema y violenta. Un voluntario de la comunidad musulmana relató a la BBC cómo Abedi había conversado con otras personas en Mánchester sobre el valor de morir por una causa.