Diez trucos imprescindibles para hacer la maleta este verano

LAURA MIGUEZ TORRES / D.S. REDACCIÓN

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LEON KUEGELER

Consejos prácticos para que hacer la maleta no suponga un quebradero de cabeza

28 jul 2017 . Actualizado a las 16:22 h.

Llega agosto y con él uno de los grandes movimientos de pasajeros del verano. Con el inicio de este nuevo mes, muchas personas comienzan sus vacaciones y con ellas la no tan agradable experiencia de hacer las maletas. Tener que encajar en un espacio tan reducido los objetos y prendas necesarios para varios días, semanas o meses suele suponer un quebradero de cabeza, pero la tarea puede resultar más sencilla si se atiende a una serie de recomendaciones y consejos. Antes de comenzar a preparar el equipaje para un viaje, hay algunos aspectos que se deberían de tener en cuenta: el medio de transporte empleado, la duración del viaje, el destino o la climatología del mismo determinarán qué se debería llevar o qué no.  

Max Rossi

El medio de transporte es un importante condicionante ya que las compañías aéreas tienen unas directrices muy estrictas con respecto a las medidas y el peso de los contenedores. Si viajamos en avión, hay que tener en cuenta las dimensiones y el peso de la maleta, ya que la mayoría de las compañías low cost permiten solo un bulto en cabina de 55 centímetros de alto, por 35 o 45 centímetros de ancho y 20 centímetros de profundidad. No obstante, conviene informarse de las restricciones que impone cada aerolínea para evitar las incidencias en los aeropuertos.

Aunque el resto de transportes no tengan unas limitaciones tan estrictas, tampoco conviene excederse. La compañía de trenes Renfe permite un máximo de tres bultos por persona, cuyo peso entre los tres no supere los 25 kg. Asimismo, aun viajando en coche, tenemos que tener en cuenta la capacidad del maletero, o en caso de hacerlo en uno compartido, como BlaBlaCar, las indicaciones del conductor. 

CARLO ALLEGRI

El contenedor en el que se transportan las pertenencias es también de gran importancia. Hay que elegir una maleta adecuada, que sea ligera y tenga suficiente espacio para guardar todos los artículos que necesitemos. Las rígidas tienen un límite de capacidad estricto y suelen ser demasiado pesadas, por lo que no son recomendables. Las maletas de tela, que además se adaptan mejor al equipaje, son más ligeras y más flexibles en cuanto a contenido. Además, es cien por cien recomendable que la misma cuente con ruedas, y si son cuatro mejor que dos, ya que permitirán conducirla sin necesidad de asumir la totalidad de su peso. 

Otra de las recomendaciones antes de decidir qué nos vamos a llevar es revisar la climatología que nos acompañará durante el viaje, y sobretodo la propia del país al que viajaremos, para no sobrecargar la maleta de ropa de invierno que es la que más ocupa y pesa. No obstante, conviene llevar siempre un comodín en caso de que la predicción meteorológica nos traicione. El destino es, por tanto, fundamental: no es lo mismo ir una semana a la playa que a caminar por la ciudad o asistir a un congreso. Y también lo es la duración, ya que nuestro equipaje estará muy condicionado por la extensión del viaje. 

Además de los aspectos a tener en cuenta, hay una serie de consejos que son de gran utilidad para aprovechar al máximo las características de la maleta y no llevar demasiadas cosas sin dejar de portar lo necesario. 

Organizar la maleta por capas

Lo primero que debemos de guardar son los elementos más pesados y susceptibles de estropear las prendas que llevamos, es decir, los zapatos y el neceser. Pondremos en la parte más cercana a las ruedas el calzado, que debe ir metido en bolsas para no manchar la ropa, y el neceser, dentro del cual se puede abrir algún líquido. En la siguiente capa irán las prendas básicas como camisetas o pantalones, que conviene acompañar por una bolsa de tela o de plástico para guardar la ropa sucia. Finalmente, la capa de arriba la ocuparán todas aquellas prendas u objetos más delicados, así como los artículos de uso más común, para no tener que deshacer la maleta nada más llegar. 

Enrollar las prendas

Esta forma de colocar las prendas en la maleta es todo ventajas ya que reducirá lo que ocupan y evitará que se arruguen. Doblarlas así es muy sencillo, y hay diversos vídeos en internet que explican cómo se puede conseguir optimizar el espacio, como este de la especialista organizadora Marie Kondo.

Atención, porque las camisas, que irán en la parte superior, es mejor abotonarlas y plegarlas, con el cuello cerrado y bien doblado, evitando así tener que buscar una plancha. 

Aprovechar los huecos

Los huecos que quedan entre las prendas y objetos que introduzcamos en el equipaje se pueden aprovechar para guardar artículos pequeños como bikinis, cinturones, bisutería o prendas pequeñas, lo cual también servirá para fijar las cosas dentro del mismo. Además, los huecos de los zapatos pueden ser un buen lugar para guardar objetos pequeños y ahorrar espacio. 

Líquidos en el equipaje

Las compañías aéreas imponen restricciones con respecto a los líquidos que se pueden portar en el equipaje de mano. Ni bebidas o alimentos líquidos, ni cosméticos o sprays, ni pastas, ni geles ni solución de lentes de contacto, a no ser que cumplan una serie de requisitos. Todos ellos deben de presentarse en envases individuales de no más de 100 ml, introducidos en una bolsa -solo se puede llevar una por pasajero- de plástico cuyo contenido no puede superar el litro.

HO

Por tanto, es conveniente llevar los deberes hechos para evitar tener que abrir y rebuscar en la maleta en el aeropuerto. Pero tampoco está de más tener en cuenta estas recomendaciones aun cuando el límite no esté establecido por el control del aeropuerto: los envases pequeños para aligerar equipaje y la bolsa para prevenir derrames de líquidos. 

Ropa útil y reutilizable

Es importante que la ropa que llevemos con nosotros sea práctica y reutilizable en más de una ocasión. Las prendas más versátiles y prácticas son aquellas que se pueden usar varias veces sin tener que lavarlas o que parezcan descuidadas y arrugadas. 

Llevar suficiente ropa interior

Sin importar a dónde se vaya, ni por cuánto tiempo, es importante llevar suficiente ropa interior para cada día. En caso de no poder lavar la ropa, se puede reutilizar una camiseta o un pantalón, pero tener ropa interior limpia para cada día es una necesidad que debemos de tener en cuenta.

No llenar la maleta de «porsiacasos»

Es necesario evitar pensar en todas las situaciones que se podrían dar y llenar la maleta de «porsiacasos» innecesarios, aumentando el peso y acaparando el espacio de la misma. Hay que ser prácticos y tener en cuenta que ante cualquier emergencia se puede recurrir a los establecimientos del lugar de destino. 

Hacer una «check list» de lo que se puede necesitar

Para evitar los «porsiacasos» y llevar un control de lo que se guarda en la maleta, preveniendo así olvidar cualquier cosa que se pueda necesitar, es útil realizar una lista. Para ello, se puede emplear alguna de las múltiples aplicaciones que han surgido para tal fin como «Travel List» con versión web o «Closet+» como aplicación móvil. 

No olvidar los imprescindibles

A la hora de salir de casa, es importante repasar que se tienen los objetos imprescindibles, como el móvil, el cargador, la cartera o las tarjetas de embarque y el pasaporte en caso de viajar en avión. Por ello, es importante guardar un lugar especial en el equipaje en el que se pueda recurrir a estos objetos de forma fácil y rápida. 

PEPA LOSADA

Preparar un pequeño botiquín

El botiquín dependerá de las necesidades de cada uno y de las características del país de destino. Sin embargo, los esparadrapos, tiritas o medicamentos genéricos siempre vienen bien para cualquier emergencia.