Arranca el macrojuicio contra medio centenar de supuestos golpistas turcos

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

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ADEM ALTAN | AFP

Simpatizantes del partido de Erdogan exigen la pena de muerte para los acusados

02 ago 2017 . Actualizado a las 07:28 h.

El mayor juicio contra los acusados del fallido golpe de Estado de julio del 2016 contra el presidente Recep Tayyip Erdogan comenzó ayer en Ankara. Unos 486 sospechosos están sentados en el banquillo, la mayoría militares de alto rango, pero también hay religiosos y empresarios. El proceso se centra en los acontecimientos acaecidos en la base aérea de Akinci, el considerado centro neurálgico de la asonada y de la que habrían despegado los aviones que atacaron centros gubernamentales.

Los sospechosos llegaron al tribunal de Sincan -construido expresamente para los juicios por el golpe fallido- escoltados cada uno por dos agentes de la Gendarmería y un soldado. El operativo de seguridad contaba además con vehículos blindados, francotiradores y un dron de vigilancia. En la entrada, simpatizantes del partido islamista AKP les abuchearon y les lanzaron sogas al grito de «¡Queremos la pena de muerte!», un castigo abolido en el 2004, pero que Erdogan se plantea recuperar pese a las advertencias de la Unión Europea.

Algunos manifestantes lucían uniformes parecidos a los de los detenidos de la prisión de Guantánamo, según informa la agencia AFP. Hacían referencia a polémica desatada en julio, cuando Erdogan se pronunció a favor de que los presuntos golpistas llevaran un uniforme único, «como en Guantánamo», después de que un acusado apareciera en un juicio con una camiseta con la palabra héroe escrita en inglés.

De los 486 sospechosos, 461 están detenidos, siete están prófugos y el resto comparece en libertad. La Fiscalía los acusa de homicidio, violación de la Constitución e intento de asesinar a Recep Tayyip Erdogan. 45 de los juzgados se enfrentan a un total de 303 penas a cadena perpetua.

El supuesto cerebro de la trama golpista, Fethullah Gülen, será juzgado en ausencia. Este clérigo se exilió en Pensilvania (EE.UU.) después de pasar de ser el gran aliado de Erdogan a su peor enemigo. También están prófugos el entonces comandante de las Fuerzas Aéreas Akin Öztürk, y uno de los más relevantes líderes religiosos gulenistas, Adil Oksuz. Quien sí está presente es el empresario Kemal Batmaz,

La acusación argumenta que el jefe del Estado Mayor, Hulusi Akar, fue secuestrado y llevado a la base de Akinci, y presentará pruebas de que ese lugar fue el cuartel general de los golpistas.

Hay abiertos varios procesos para esclarecer lo ocurrido el 15 de julio del 2016. Desde entonces, unas 50.000 personas han sido encarceladas por supuestos vínculos con Gülen, han sido cesados 150.000 funcionarios, un millar de negocios pasaron a manos del Estado, se cerraron medios de comunicación y numeroso periodistas fueron detenidos.