Finlandia descubre que la renta básica universal tranquiliza a sus ciudadanos y los anima a emprender

D. F. F. | P. V. LA VOZ

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Los ciudadanos finlandeses que reciben ingresos básicos muestran niveles de estrés más bajos y mayores ganas de trabajar

26 ago 2017 . Actualizado a las 09:10 h.

El pasado mes de enero, Finlandia comenzó con su programa piloto de la renta básica universal. Un experimento mediante el que el gobierno finlandés, con el objetivo de descubrir los beneficios y los inconvenientes de dar una renta básica mensual a sus ciudadanos, decidió ofrecer una paga libre de impuestos a un total de 2.000 personas. Y, meses después de este test, los resultados han sido sorprendentes y mucho más positivos de los que muchos analistas suponían de antemano.

Los participantes han recibido 560 euros cada mes durante dos años y no han tenido que demostrar que estaban buscando activamente trabajo. Si un participante encontraba trabajo, continuaría recibiendo igualmente la cantidad de dinero, eliminando así una de las limitaciones de los sistemas de bienestar actuales, el desincentivo por encontrar trabajo.

Esta renta básica elimina una de las limitaciones de los sistemas actuales: el desincentivo por encontrar trabajo Esta renta universal básica, aunque todavía un programa piloto, es la primera medida de su tipo en Europa. Los beneficiarios no tienen que demostrar que buscan empleo y no están obligados a informar regularmente a las autoridades de si todavía necesitan el pago, como es el caso de los beneficios de desempleo estándar. Pueden gastar el dinero como quieran.

La iniciativa, aplicada por el gobierno de centroderecha, fue introducida en enero de este año para abordar el problema del desempleo en Finlandia, y ahora, tras ocho meses, el Gobierno ya ha visto beneficios: disminución del estrés, mayores incentivos por encontrar trabajo, más tiempo para buscar ideas de negocios y ser emprendedor.

Juha Jarvinen, un joven desempleado y padre finlandés de un pueblo cerca de Jurva, fue elegido al azar en enero de este año para comenzar a recibir el pago y explicó el porqué del fruto de la iniciativa a The Economist. Desde que comenzó a recibir el pago, a diferencia de cuando estaba recibiendo pagos de desempleo estándar, comenzó a buscar trabajo activamente. ¿Por qué? Anteriormente, como a muchos ciudadanos, le ofrecieron algunos puestos de trabajo a tiempo parcial, ocupaciones que para él no tendría sentido coger, ya que no le compensaban por su carácter temporal y que supondrían la pérdida de sus ayudas al desempleo.

Cuenta que desde entonces está en proceso de iniciar su propio negocio, que está mucho menos estresado y ya no tiene que pasar por la «demostración tonta» de llenar formularios o asistir a entrevistas regulares con los funcionarios de la agencia de empleo, algo que le suponía perder parte de su tiempo.

A muchos no le han sorprendido los resultados observados hasta ahora en el proyecto piloto, a otros sí. En febrero de este año, el sindicato más grande de Finlandia, que representa a casi un millón de personas, o un quinto de la población finlandesa, dijo que el experimento era inasequible y alentaría a las personas a trabajar menos.

En marzo, Ontario, la provincia más grande de Canadá, anunció que estaba probando un plan universal similar de ingresos básicos. La primera ministra de Ontario, Kathleen Wynne, dijo que el plan era necesario para abordar los «nuevos desafíos» que presenta la economía moderna. ¿Sería esto viable o posible en España?