La muerte del Ché Guevara, una polémica de medio siglo

héctor estepa BOGOTÁ / E. LA VOZ

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MARTIN ALIPAZ | efe

Gobierno y militares chocan en Bolivia por el 50 aniversario de la muerte del Ché Guevara

07 oct 2017 . Actualizado a las 08:45 h.

Ernesto Ché Guevara de la Serna sigue causando división medio siglo después de su muerte. Bolivia, lugar donde el guerrillero argentino-cubano fue capturado y ejecutado en 1967, ha organizado un polémico homenaje de cuatro días para honrar su memoria que ha desatado las críticas de los militares que lo combatieron. El acto central tendrá lugar el próximo lunes en Vallegrande, la ciudad donde se exhibieron hace 50 años los restos mortales. Acudirán los cuatro hijos vivos del combatiente. También el vicepresidente de Venezuela Tareck el Aissami, y el de Cuba Miguel Díaz Canel, visto por muchos como presidente de la isla caribeña a partir del próximo febrero, sustituyendo a Raúl Castro.

Bolivia pretendía, en un principio, que al menos dos ex guerrilleros cubanos volviesen al país andino para reunirse con los militares que los combatieron a ellos y a Guevara. El objetivo era organizar un acto de reconciliación para «sanar heridas», al considerar el Gobierno que los tiempos han evolucionado. Quienes combatieron al Ché, sin embargo, se han negado en redondo. «¿Darnos la mano con qué guerrilleros? Si no hay guerrilleros. Los únicos vivos de aquella campaña son desertores, nunca combatieron. Entonces ¿qué? ¿Ir a darles la mano a los cubanos que organizaron todo esto?», criticó el hoy general retirado Gary Prado, el entonces capitán que capturó al revolucionario en la Quebrada del Churo, cerca de La Higuera. «No tiene sentido», añadió.

Los militares sufrieron 59 bajas en los combates de 1967. Generales en retiro han organizado varios actos para rendir honores a los caídos, independientes de los actos en recuerdo a Guevara.

Bolivia sigue, en cambio, asegurando que las fuerzas armadas participarán en los homenajes, de una u otra forma. El partido del Gobierno impulsó en la Cámara de Diputados la creación de una medalla con el nombre del guerrillero. Representará «la lucha contra el imperialismo, la promoción de la igualdad social, y el socialismo». En tanto, el Parlamento rechazaba la petición de la oposición de volver a realizar un homenaje oficial a los militares caídos en 1967, como se hacía hasta la llegada de Morales al poder.

El Gobierno asegura que los actos serán pagados por el conjunto de asociaciones y partidos afines al MAS de Morales, pero la oposición cree que serán financiados por el Ministerio de Exteriores, teniendo en cuenta la visita de dignatarios extranjeros.

No solo en Bolivia sigue causando polémica el ex guerrillero. Guevara cuenta con una estatua en Rosario, su ciudad argentina natal. Un grupo de ciudadanos creó el pasado agosto una polémica encuesta en Internet para eliminar el monumento. «Tuvo campos de concentración para opositores políticos en Cuba, incluso para los homosexuales, hacia quienes tenía una animosidad muy profunda», dijo Franco López, director de la Fundación Bases, promotora de la propuesta. Juan Martín Guevara, hermano del guerrillero, calificó de ridícula la campaña y negó el calificativo de asesino para su hermano. «En un mundo cada vez más incierto y desigual, su imagen es una amenaza», señaló a su vez un comunicado de la Fundación un Mundo Mejor es Posible, en defensa de la estatua.

En Colombia, la figura del Ché es ensalzada por los ahora políticos de las FARC y los todavía guerrilleros del ELN. Hace un año se vivió una polémica a cuenta de la decisión de un grupo de estudiantes de borrar la imagen del Ché que decoraba una plaza dentro de la Universidad Nacional. La decisión causó división ?otros hablan de persecución- entre los estudiantes en torno a una figura controvertida medio siglo después.