El humo de los incendios que arrasan Galicia y Portugal llega a Londres

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Los vientos intensos del sur asociados al ciclón «Ophelia» empujan hacia Reino Unido una nube de humo y polvo procedente del norte de España

17 oct 2017 . Actualizado a las 08:06 h.

Mientras Irlanda está sufriendo el impacto directo del ciclón extratropical Ophelia, con fuertes vientos y olas gigantes, en la vecina Inglaterra una nube de polvo y humo ha oscurecido el cielo de muchas regiones del sur del país, como Londres, dejando imágenes espectaculares propias de un largometraje de ciencia ficción como Blade Runner.

Parte del humo procedente de los incendios que asolan a Galicia y norte de Portugal está alcanzado el Reino Unido empujado por los vientos intensos del sur asociados al ciclón Ophelia.

Antes de que se convirtiera en una borrasca potente, Ophelia, en su condición de huracán ascendió desde las Azores hacia el norte, pasando por Galicia. Junto con el anticiclón, situado sobre Europa crearon un corredor de vientos del sur que arrastaron aire cálido desde latitudes tropicales hasta nuestra comunidad. Esto explica las temperaturas tan elevadas que se registraron en toda la comunidad, con máximas de 35º en la mariña lucense, donde no recuerdan un calor de esa naturaleza y mínimas por encima de los 20º grados.

Pero además de enviar aire caliente, la autopista atmosférica que formaron el huracán y el anticiclón también arrastró polvo del desierto hacia la península. En Galicia no se ha podido detectar con tanta intensidad por culpa de los incendios pero la calima ha conseguido alcanzar este lunes el Reino Unido y junto al humo han creado una niebla que cubre la capital inglesa.

Seguro que muchos londinenses estarán acordándose hoy del episodio de smog o niebla química que en 1952 mató a miles de personas por la mala calidad del carbón que quemaron los hogares durante una ola de frío. En este caso el responsable la niebla química llega desde el exterior, concretamente desde nuestra comunidad y también desde el Sahara.

 Europa sigue viviendo a estas horas un episodio meteorológico histórico que se ha cebado con Galicia debido a la acción de los incendiarios. Ophelia alcanzó el sábado por la tarde la categoria de huracán mayor. Nadie imaginaba que un fenómeno de esas dimensiones podría pasar tan cerca de la costa gallega. 

En este ambiente de humo y polvo del desierto, el Sol en muchas zonas también adquiere un tono rojizo, que suele presentar muchas veces durante el ocaso. Esto ocurre por un efecto de la dispersión de la luz. La luz blanca se encuentra con una atmósfera más densa, por la presencia de partículas y se divide en todos los colores del arco iris. El azul se dispersa en todas las direcciones y no consigue alcanzar el ojo humano permitiendo el paso a los siguientes colores en el espectro visible; el rojo, el naranja y el amarillo.