«Anunciamos una huelga de voto, no reconoceremos los resultados», reaccionó el opositor poco después del anuncio de la comisión
26 dic 2017 . Actualizado a las 07:31 h.El principal opositor ruso, Alexei Navalni, hizo ayer un llamado a boicotear las elecciones presidenciales del 18 de marzo del 2018 después de que su candidatura fuera rechazada, en unos comicios en los que Vladimir Putin se encamina a conseguir su cuarto mandato. Basándose en una condena judicial, que el carismático opositor califica de un montaje del Kremlin, lo doce miembros del Comité Electoral Central apoyaron el rechazo de su candidatura presentada el sábado, tras movilizar la víspera a miles de sus seguidores en veinte ciudades rusas para intentar imponer su candidatura.
«Anunciamos una huelga de voto. Vamos a pedir a todo el mundo que boicotee estas elecciones, no reconoceremos los resultados», reaccionó el opositor poco después del anuncio de la comisión. «El proceso al que estamos invitados a formar parte no es una elección. Solo Putin y los candidatos que él personalmente ha elegido, los que no representan ninguna amenaza, pueden participar», explicó en un vídeo difundido en su página web. La decisión era previsible, ya que la comisión ya había advertido en varias ocasiones que Navalni no podría presentarse antes del 2028 debido a una condena judicial por desvío de fondos en un caso que se remonta al 2009.
Navalni tiene una base de partidarios fieles, a veces muy jóvenes, ganados por su denuncias de la corrupción de las élites rusas. En sus mítines ha congregado a miles de simpatizantes y ha abierto decenas de oficinas de campaña por todo el país, a los que ahora llama a boicotear los comicios. Carismático abogado y bloguero anticorrupción, con tintes a veces nacionalistas, en marzo y junio también organizó dos importantes manifestaciones, que se saldaron con miles de detenciones.