Otros cinco municipios asturianos bajarán el coeficiente para el cobro del tributo en 2018
06 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El nuevo catastrazo tendrá consecuencias en cuatro concejos asturianos. Colunga, Corvera, Cudillero y Cangas de Onís incrementarán la cuota del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) en 2018 después de que el Gobierno central aprobase en el último consejo de ministros la modificación de las referencias catastrales, que es la que se utiliza para calcular el gravamen. La última palabra sobre la subida definitiva la tendrán los ayuntamientos, pero el Ejecutivo de Rajoy ya se ha posicionado oficialmente. En el otro extremo se encuentran Allande, Castropol, Degaña, Lena y Vegadeo, que abaratarán la cuota para este ejercicio.
La medida adoptada por el consejo de ministros no implica una subida inmediata del recibo, ya que ahora tendrán que ser los diferentes equipos de gobierno municipales los que validen esa subida o bajada. Los cuatro asturianos que han optado por incrementar el tributo forman parte de un grupo de 1.295 que ha decidido hacerlo en toda España. El porcentaje de subida del recibo varía en función del año en el que entró en vigor la última revisión, lo que explica que otros 535 hayan optado por abaratar el gravamen para adaptarse a la nueva realidad económica del país. En el caso de los concejos asturianos, el incremento será en todos los casos del 4%.
Posibles subidas de otros impuestos
Entre los municipios con mayor población que revisarán al alza el IBI en 2018 figuran Valencia, Teruel, Logroño, Huesca, Huelva, Cádiz y Badajoz, según el grupo internacional de consultoría Ayming, que advierte también de que este incremento del IBI puede conllevar, asimismo, el alza de otros cinco impuestos más.
Según el responsable fiscal de Ayming, David García Vázquez, un contribuyente con una vivienda cuyo valor catastral sea de 200.000 euros y se encuentre en un municipio con una ponencia de valores del año 1990 y, por tanto, afectada por un alza del coeciente de actualización catastral, va a pagar este año 120 euros más de IBI respecto al año 2017.
Por otro lado, advierte de que indirectamente la subida del valor catastral va afectar a otra serie de tributos relacionados con bienes inmuebles para los que la determinación de la base imponible de estos impuestos influye de forma más o menos directa la determinación del valor catastral. Entre otros, se encuentran el IRPF, donde se declara la imputación de renta inmobiliaria en inmuebles que no son vivienda habitual del contribuyente ni están alquilados ni destinados a una actividad económica.
Otros impuestos que pueden verse afectados son el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP) y el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. En estos impuestos, en la gran mayoría de comunidades autónomas, la base imponible se determina por el valor que se establece en el catastro, multiplicado por los coecientes fijados por cada administración autonómica. Así ocurre entre otras, en comunidades como Andalucía, Aragón, Asturias, Baleares, Cantabria, Extremadura, Galicia o País Vasco.
Finalmente, también puede resultar afectado el Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de naturaleza Urbana (IIVTNU), comúnmente denominado plusvalía municipal, cuya base imponible también se determina por el valor catastral que tiene el suelo. Por todo ello, Ayming aconseja a los contribuyentes que revisen el cálculo del valor catastral de sus inmuebles, ya que las consecuencias tributarias de que el valor esté mal calculado no solo afecta exclusivamente para determinar la cuota tributaria del IBI, sino que pueden verse afectados otra serie de tributos como los citados.