El plan europeo de Macron, un escollo en la negociación entre Merkel y Schulz

Patricia Baelo BERLÍN / CORRESPONSAL

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JOHN MACDOUGALL | afp

La CDU y el SPD apuran sus últimos cartuchos para reeditar la gran coalición

12 ene 2018 . Actualizado a las 07:53 h.

«El día de las decisiones». Así se refería ayer la prensa alemana a la quinta y última jornada consecutiva de la primera toma de contacto entre el bloque conservador de Angela Merkel y los socialdemócratas de Martin Schulz en busca de un nuevo Gobierno. Una fase exploratoria tras la cual quedará claro si ambos partidos están dispuestos o no a reeditar la gran coalición, para poner fin a la inédita crisis que se prolonga desde hace más de tres meses.

«Será un día difícil. Nosotros pondremos todo lo que esté en nuestra mano para lograr compromisos, pero tenemos que garantizar que la política que hagamos sea adecuada para Alemania», afirmaba cautelosa la líder cristianodemócrata. En la misma línea se expresó su homólogo socialista, quien a horas de que expirase el plazo mencionó los «grandes escollos que deben ser salvados» en materia financiera, fiscal, migratoria, laboral, sanitaria y, sobre todo, europea.

El jefe del SPD y expresidente de la Eurocámara insiste en la propuesta de Emmanuel Macron para «renovar y fortalecer» la UE. Por su parte, el bloque conservador ( la CDU y la CSU bávara) no ve con buenos ojos ni la mutualización de la deuda ni la creación de un ministro de Finanzas europeo. Los grandes retos actuales requieren respuestas conjuntas, argumentó Schulz al llegar a la sede de su partido, donde le esperaban personas que enarbolaban la fotografía del presidente francés y banderas con el lema «Hacer grande Europa otra vez», a imitación del de Trump.

Con todo, tanto Merkel como Schulz se mostraron confiados en que las conversaciones lleguen a buen puerto. De hecho, según filtraron los últimos días algunos medios, la CDU y el SPD ya habrían logrado un principio de acuerdo que permite a los trabajadores cualificados de origen extranjero quedarse en Alemania. También en el ámbito medioambiental parece haber consenso, pues ambas formaciones estarían dispuestas a renunciar a su objetivo de reducir las emisiones contaminantes en un 40 % para el 2020 por considerarlo inalcanzable.

De concluir con éxito la ronda de contacto, las cúpulas de los dos partidos deberán analizar el documento que presentarán hoy, y el 21 de enero el SPD decidirá durante un congreso extraordinario si desea pasar a la fase de las negociaciones formales. Las juventudes socialistas y el ala más izquierdista son reticentes a seguir desgastándose en otra alianza con Merkel, después de cosechar su peor resultado en las elecciones de septiembre.

Aunque al mismo tiempo son conscientes de que, tras el fracaso de las conversaciones entre conservadores, liberales y ecologistas en noviembre, la única opción para evitar unos nuevos comicios que solo fortalecerían aún más a la ultraderecha es reeditar la gran coalición. La canciller, que se niega a formar un Gobierno en minoría por la inestabilidad que conlleva, se la juega. De acuerdo con una encuesta del diario Handelsblatt, el 56 % de los alemanes creen que Merkel dejará el cargo antes de que concluya la legislatura en el 2021.