Una cuenta de infarto: cuatro filetes y un pescado por 1.143 euros

La Voz REDACCIÓN

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Andrea Merola | EFE

Cuatro estudiantes japoneses denuncian que se llevaron el susto de su vida en un restaurante de Venecia

23 ene 2018 . Actualizado a las 12:36 h.

Cuatro estudiantes japoneses se llevaron el susto de su vida al ver la cuenta por lo que habían consumido en un restaurante cercano a la turística plaza de San Marcos en Venecia. Cuatro filetes, un plato de pescado, agua mineral y el servicio por un total de 1.143 euros. Un «sablazo» en toda regla que primero pagaron con tarjeta y luego denunciaron en la comisaría de Bolonia, donde estudian, según señalan medios italianos.

El restaurante en cuestión es una taberna en el área de Mercerie que es propiedad de un chino y es administrada por un egipcio, según informa La Repubblica. Este periódico recoge otros testimonios de clientes en la web de Tripadvisor. «Para ser cerrado inmediatamente» dice Raffaele que muestra un recibo de 16 euros por dos cervezas de barril.  «Vergonzoso para el nombre de Italia», dice otro.

El «sablazo» a los cuatro jóvenes japoneses ha saltado a la luz pública gracias a Marco Gasparinetti, portavoz de la plataforma cívica «Grupo 25 de abril» quien conoció el caso gracias a la guía turística de los nipones. 

«En los próximos días vamos a verificar bien este episodio, enviaremos la copia de la queja si fue presentada: si este caso vergonzoso se confirma, haremos todo lo posible para castigar a los responsables», ha anunciado el alcalde de Venecia, Luigi Brugnaro, a través de su cuenta de Twitter.

El caso denunciado por los estudiantes japoneses no es aislado en Venecia. Ese mismo día tres jóvenes turistas pagaron 350 euros en una pizzería por 3 platos de espaguetis y en noviembre otros tres turistas asiáticos abonaron 560 por una comida que incluía pescado, dice el periódico El Gazzetino.

En este último caso los turistas habían afirmado que el camarero había jugado con el hecho de que no sabían italiano para llevarles a la mesa costosos platos que no habían pedido. En ese momento el alcalde de la ciudad, Luigi Brugnaro, tuvo una polémica reacción. «Uno come y bebe, luego dice que no sabía el idioma. Pero si vienes a Italia tienes que aprender italiano. Comieron langosta y no dejaron nada en el plato. Le pregunté al camarero si le habían dejado propina, ni siquiera eso», comentó.