La Unesco despide a uno de sus subdirectores por intentar besar a la fuerza a una funcionaria

La oleada de casos de acoso sexual iniciada en Haití, cuando se descubrió que directivos de Oxfam habían contratado prostitutas tras el terremoto que devastó el país, no se detiene. La Unesco destituyó al subdirector general de Comunicación e Información, el guatemalteco Frank La Rue, tras haber sido denunciado por un caso que está siendo objeto de investigación interna, indicaron ayer a Efe fuentes de la organización.

El cese se produjo el pasado lunes, dos días antes de que La Rue, de 65 años, se jubilara al término del contrato que había firmado con la anterior directora general, Irina Bokova. Llega apenas unos días después de que la ONU reconociera que cooperantes locales condicionaron la entrega de alimentos en Siria a la obtención de favores sexuales, forzando incluso matrimonios con menores.

Dos meses después de su llegada a la máxima responsabilidad de la organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), la francesa Audrey Azoulay aplicó una política de «tolerancia cero» con estos casos y destituyó a La Rue antes de publicarse las conclusiones de la investigación. Un portavoz señaló que la política de la organización es «estricta» en lo que se refiere a los casos de acoso sexual y confirmó que han despedido a un directivo en función de ese rigor, sin querer pronunciarse sobre la identidad de los implicados «por respeto a las víctimas».

Según diversos medios, el subdirector de la Unesco trató de besar por la fuerza a una funcionaria perteneciente a la organización que, en noviembre pasado, presentó una denuncia por acoso, lo que motivó la apertura de la investigación. Suspendido inicialmente de sus funciones hasta conocerse las conclusiones de las pesquisas, la organización decidió el lunes destituirle. El diario francés 20 minutes asegura que La Rue reconoció los hechos y pidió perdón a la denunciante.

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