5 Estrellas y el Partido Democrático abren el diálogo para gobernar

maría signo ROMA / CORRESPONSAL

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ALESSANDRO DI MEO

El paso dado cuenta con la oposición de Matteo Renzi, quien ha empezado a maniobrar para que no prospere

27 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El encargo dado por el presidente de la República, Sergio Mattarella, al presidente de la Cámara de Diputados, Roberto Fico, ha tenido un éxito relativo ya que consiguió que el Movimiento 5 Estrellas (M5E) y el Partido Democrático (PD) se muestren dispuestos a llegar a un acuerdo de gobierno. Ambos reconocen que no se pueden esconder «dificultades y diferencias» entre ellos y que, antes de decidir, tienen que escuchar «con respeto» el debate interno en cada formación, pero, según explicó Fico tras encontrarse con el presidente, el dialogo entre los dos se encuentra abierto.

En el PD habrá que esperar hasta el próximo 3 de mayo cuando se reúna la dirección nacional. Allí el secretario en funciones Maurizio Martina, que encabezó la delegación que se reunió con Fico, se la juega porque es donde se podrá saber con certeza si dentro del PD hay voluntad de formar Ejecutivo con Luigi Di Maio o quedar en la oposición. Mientras Martina se mostraba abierto a la colaboración «en el interés de Italia» y aseguraba que «hemos llegado hasta aquí porque otros han fallado», la oposición interna encabezada por Matteo Renzi, empieza a moverse en contra del secretario en funciones y de la posibilidad de acuerdo.

El florentino no perdona los insultos y descalificaciones sufridas durante su Gobierno por líderes de 5 Estrellas y no está dispuesto a pactar con ellos. Por eso, critica la intentona de Martina, al que considera demasiado condescendiente con «sus» enemigos. Pero en el partido muchos temen que, si no se llega a un acuerdo, la solución a la crisis pase por volver a las urnas, lo que podría llevar a una total debacle de los democráticos que el domingo en Molise solo alcanzaron el 7 % de los votos, datos negativos que podrán confirmarse el próximo 29 con los resultados en Friuli donde con toda seguridad perderán el gobierno regional.

Luigi Di Maio ha solicitado tanto al PD como a los suyos hacer todo lo posible para llegar a una acuerdo por «el bien del país» proponiendo no un compromiso, sino un «gobierno de altura», según dijo. Si esto no se consigue, propondrá al presidente Mattarella nuevas elecciones con la expectativa de que de ese modo «el M5E crecerá aún más». Una posición de fuerza la de Di Maio que ya el martes había anunciado la ruptura de negociaciones con Matteo Salvini y la Liga por no haber sido capaz de abandonar a su aliado en la coalición Silvio Berlusconi, tal y cómo ellos exigían.

Los ataques de Di Maio al ex Cavaliere se centraron ayer en el conflicto de intereses, un tema importante para la formación populista. «Es el momento de tomar medidas» porque las televisiones de Berlusconi «lanzan veladas amenazas a Salvini ante la posibilidad de que este lo abandone» y, por eso, según Di Maio, «ha llegado el momento de decir que un político no puede poseer órganos de información en Italia».

De «telenovela» definió Salvini el principio de acuerdo entre M5E y el PD. «Esperemos que no dure mucho porque sería un gobierno irrespetuoso con los italianos», afirmó. El líder de la Liga no quiere cerrar la puerta a Di Maio convencido de que hay que actuar con rapidez para formar un Ejecutivo que «represente el voto de los italianos». Además se declaró dispuesto a garantizar de que «alguno deje de insultar», en referencia a Berlusconi que el miércoles de nuevo lanzó duros ataques a 5 Estrellas a los que comparó con la llegada al poder de Hitler. Salvini confía en que una victoria en las elecciones regionales del domingo en Friuli fortalezca aún más a la Liga dentro de la coalición de centro derecha.