El Reino Unido se va de boda con Enrique y Meghan

rita á. tudela LONDRES / CORRESPONSAL

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Curiosos y fans de la familia real británica toman Windsor; el príncipe Carlos llevará al altar a su futura nuera

19 may 2018 . Actualizado a las 12:16 h.

Más de 100.000 personas han invadido Windsor. Unos 5.000 periodistas han desembarcado en la ciudad. El Reino Unido se va de boda real. Y con los británicos, medio mundo. Este es el enlace del año.

Carlos de Inglaterra será el encargado de llevar a Meghan Markle al altar del templo de San Jorge. El príncipe de Gales está «contento de poder dar la bienvenida a Meghan a la familia real de esta manera», informó el palacio de Kensington, confirmado así una opción impensable hace unos meses, pero que se ha visto precipitada por la operación de corazón a la que fue sometido el padre de Meghan en México. El que sí asistirá a la boda más esperada del año será el abuelo del príncipe Enrique, el duque de Edimburgo, quien a sus 96 años se recupera formidablemente de una reciente operación de cadera.

La madre de la contrayente, Doria Ragland, conoció ayer a la reina en un encuentro privado en el que disfrutaron de una ceremonia del té. Con ese mismo formato le presentaron el pasado jueves a Carlos y Camilla en Clarence House.

La ceremonia será oficiada por el arzobispo de Canterbury, Justin Welby y empezará a las 13.00 (hora española). El sacerdote interpreta que el hecho de que el príncipe Carlos lleve al altar a su futura nuera retrata al heredero como una «persona cálida», que muestra de su amor, preocupación y apoyo.

La novia estará acompañada de diez pajes, entre ellos, Jorge y Carlota, los hijos mayores de los duques de Cambridge. No habrá dama de honor, ya que Markle se negó a tener que elegir entre sus mejores amigas. Curiosos y fanáticos de la familia real han llegado a pasar más de una noche en la calle para guardar un sitio privilegiado en Windsor y poder ver de cerca al matrimonio cuando recorra en carroza las calles de esta emblemática ciudad situada al sur de Londres.

La novia pasó la noche previa a la boda con su madre en el lujoso hotel de Cliveden House, en Buckinghamshire, a unos nueve kilómetros del castillo. Su prometido lo hizo en Ascot con su hermano, el duque de Cambridge. Hoy, ya juntos, serán los grandes protagonistas del enlace del 2018.