El Corte Inglés decidirá en quince días la continuidad de Gimeno como presidente

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Antonio_Quilez | efe

Siete de los diez consejeros pretenden cesarlo en la próxima reunión extraordinaria

31 may 2018 . Actualizado a las 08:19 h.

Tensión y un balón de oxígeno temporal -muy temporal- a Dimas Gimeno, que aún continua ocupando la presidencia de El Corte Inglés. Ese fue el resultado del consejo de administración ordinario celebrado este miércoles en el gigante español de la distribución y en el que, a pesar del enfrentamiento irreconciliable entre las dos facciones del capital, se aprobaron por unanimidad las cuentas del 2017, que se cerraron el 28 de febrero. Pero los números, que deberá ratificar la junta general el último domingo de agosto, no fueron lo único que consiguió el apoyo unánime de los consejeros, ya que estos también respaldaron al alimón la celebración de un nuevo consejo -en esta ocasión extraordinario- para someter a votación «la continuidad o no» de Gimeno como presidente.

Así lo confirmaron fuentes conocedoras de la reunión, que matizaron que, aunque el citado consejo tendrá que celebrarse «en la primera quincena de junio», aún no hay fecha para él.

La fractura en la planta noble de El Corte Inglés es evidente y enfrenta al aún presidente y a sus primas, Marta y Cristina Álvarez Guil. Gimeno fue designado por su predecesor y tío, Isidoro Álvarez, antes de su fallecimiento, en detrimento de sus propias hijas, que también se sientan en el consejo y aglutinan la mayoría del capital.

El 70 % del capital es contrario a la continuidad de Dimas Gimeno en la presidencia Las fuentes consultadas explicaron que, aunque en un primer momento (a principios de mayo) habían sido cuatro los consejeros que solicitaron la convocatoria de una reunión extraordinaria para acordar el cese de Gimeno, este mismo miércoles, después de que se sumara Paloma Garcia Peña, representante de Cartera Mancor (con un 10 % del capital), ya eran siete de los diez integrantes del órgano de administración los que habían manifestado que la intención de su voto será la de sustituir al presidente.

Solo el expresidente de Endesa, Manuel Pizarro, y el representante del jeque catarí Al Thani no avanzaron su voto, aunque sí respaldaron la convocatoria de un consejo extraordinario en la primera mitad de junio. Cabe recordar que la figura del inversor catarí, que el aún presidente pretende tener como aliado, es importante, ya que en la próxima junta general pasará a tener entre el 10 y el 12 % del capital, al materializarse en acciones el préstamo de 1.000 millones, más los intereses, que le hizo al grupo hace casi tres años.

Salida a bolsa, sobre la mesa

Gimeno aprovechó también para poner sobre la mesa los puntos que introdujo a última hora en el orden del día del consejo, relativos a la modernización de la empresa. Entre ellos estaba, por ejemplo, la salida a bolsa de la compañía, una operación con la que pretende ganar apoyos como el del inversor catarí.

Aunque las fuentes consultadas confirmaron que el asunto se trató en el consejo y fue bien acogido, precisaron que en ningún momento llegó a votarse y que, además, le comunicaron a Gimeno que, en todo caso, las iniciativas relativas al negocio les correspondían a los consejeros delegados. Lo mismo ocurrió con el resto de las propuestas del aún máximo responsable de El Corte Inglés, como la incorporación de más consejeros independientes al órgano de dirección o la investigación de la contratación de la seguridad del grupo.

Un gigante con 3.500 empleos directos en Galicia y más de 100.000 en todo el país

El conflicto familiar que se está viviendo en el seno del consejo de administración del buque insignia de los grandes almacenes españoles genera inquietud. No en vano El Corte Inglés es una de las mayores empresas del país: genera más de 100.000 empleos directos, 3.500 de ellos en Galicia. Sin embargo, las fuentes consultadas por La Voz sostienen que el enfrentamiento por hacerse con las riendas del grupo no está afectando a su actividad comercial.

Según los últimos resultados hechos públicos, correspondientes al año 2016, la firma facturó más de 15.000 millones de euros y ganó 162, lo que se traduce en un 2,4 % más que el ejercicio anterior.

En lo que respecta a este último año, cuyas cuentas aprobó ayer el consejo de administración (inicialmente era el único punto del orden del día de la reunión), aunque no se conocerán hasta que se celebre la junta de accionistas, el último domingo de agosto, prometen ser muy positivas. Así lo avanzó el presidente, Dimas Gimeno, semanas atrás, cuando aseguró que los beneficios habían crecido «a doble dígito», gracias a un incremento de ventas «superior a la media del sector».

En Galicia, el gigante de la distribución tiene una plantilla de 3.495 empleados directos, repartidos entre sus diferentes unidades de negocio en las cuatro provincias: desde los grandes almacenes a supermercados, ópticas, agencias de viajes, bricolaje, moda o seguros.