La jueza rechaza dejar en libertad a Eduardo Zaplana a pesar de los informes médicos presentados

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Kai Foersterling | Efe

La magistrada asegura que el expresidente, que solicitó su libertad por cuestiones de salud después de que en el 2015 se le diagnosticara una leucemia, ha tenido una vida muy activa estos años acudiendo a restaurantes o a dar conferencias

04 jun 2018 . Actualizado a las 13:25 h.

La titular del Juzgado de Instrucción número 8 de Valencia, que instruye el caso Erial en el que se investigan delitos de cohecho, blanqueo de capitales, malversación y prevaricación, ha desestimado dejar en libertad o en arresto domiciliario al expresidente de la Generalitat y exministro Eduardo Zaplana, han informado fuentes jurídicas.

La defensa de Zaplana, ejercida por el bufete de Miláns del Bosch, solicitó la semana pasada, mediante un recurso de reforma, la libertad por razones humanitarias, o en su defecto arresto domiciliario del expresidente de la Generalitat y exministro, que permanece en prisión desde el pasado 22 de mayo.

El pasado viernes, el fiscal anticorrupción se opuso a esa libertad condicional de Zapalana que en el año 2015 se le diagnosticó una leucemia, por considerar que existía riesgo de fuga y posibilidad de destrucción de pruebas.

Fuentes de la defensa han indicado que la jueza ha denegado la petición pese a los informes médicos, incluido el forense, que informaban negativamente de la permanencia en prisión de Zaplana, ya que sufre «un cuadro profundo de immunosupresión», lo que supone un «mayor riesgo de sufrir infecciones y que puede llegar incluso a riesgo de muerte».

En el auto de prisión del pasado 22 de mayo, la jueza acusó a Zaplana de los delitos de blanqueo de capitales, cohecho, prevaricación, malversación de caudales públicos, tráfico de influencias, fraude en la contratación, delito fiscal, falsedad documental, asociación ilícita para delinquir y grupo criminal.

La magistrada justifica su decisión alegando que las vigilancias a las que ha sometido a Zaplana durante estos últimos años demuestran que el expresidente ha tenido una vida «muy activa» acudiendo a restaurantes o a dar conferencias «desplazándose de un sitio a otro sin llevar mascarilla, en un medio hostil donde se puede coger cualquier tipo de virus».

En el caso Erial, el juzgado de Instrucción número 8 de Valencia investiga, entre otras actuaciones, el presunto cobro de comisiones derivadas de la concesión de las Inspecciones Técnicas de Vehículos (ITV), realizadas en 1997 durante la gestión de Zaplana al frente de la Generalitat, y del Plan Eólico de la Comunitat Valenciana, puesto en marcha en 2003.