Aplazado el juicio contra Juana Rivas tras renunciar su abogado a la defensa

Europa Press GRANADA

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Juan de Dios Ramírez ha abandonado el estrado, dejando sola a la madre de Maracena en el banquillo de los acusados, después de que el juez no haya aceptado su petición de suspender la vista

14 jun 2018 . Actualizado a las 17:34 h.

El juicio previsto este jueves en el Juzgado de lo Penal 1 de Granada contra Juana Rivas acaba de ser aplazado hasta el 18 de julio después de que su abogado haya renunciado a la defensa y haya abandonado la sala, pese a la prohibición expresa del magistrado, que ha calificado de «esperpento» lo ocurrido, de lo que deducirá testimonio a la Fiscalía, el Juzgado de Guardia y el Colegio de Abogados de Sevilla. 

El abogado Juan de Dios Ramírez ha abandonado el estrado, dejando sola a Juana Rivas en el banquillo de los acusados, después de que el juez no haya aceptado su petición de suspender la vista. Lo ha pedido alegando que se ha desvinculado en los últimos tiempos de la defensa de la madre de Maracena, de modo que no ha tenido tiempo para prepararse este juicio, y que ella desea que sea otro de los letrados del caso, José Estanislao, quien la represente por tener depositada su «confianza plena en él». Este último letrado está de baja por una úlcera en una pierna que le impide desplazarse. 

El juez ha denegado la suspensión al entender que si el letrado Juan de Dios Ramírez ha suscrito el escrito de defensa es porque ha ultimado todos los trámites del procedimiento penal, por lo que de aceptar la suspensión «tendría que sancionarle» porque «qué clase de profesional sería usted», le ha advertido el magistrado antes de que abandonara la sala.

Igualmente, el abogado ha renunciado a la defensa y se ha marchado, por lo que el juez ha dado a Juana Rivas tres días de plazo para que elija otro abogado o se le designará uno de oficio, de modo que la vista pueda celebrarse el 18 de julio. Ella ha llegado a «suplicar» que sea su letrado de confianza quien la represente pero el juez le ha advertido de que esto «no es serio»: «El abogado que usted ha elegido se ha levantado y se ha ido» y el otro está «enfermo» y «no sabemos cuando se va a recuperar».

Antes de la polémica sesión, Juana Rivas ha declarado que es «inocente» y «se va a demostrar muy pronto». Lo ha hecho a su llegada al edificio judicial de La Caleta de Granada, minutos antes de ser juzgada por la presunta sustracción de sus dos hijos menores de edad tras pasar casi un mes en paradero desconocido incumpliendo la orden judicial que le obligaba a entregarlos al padre, el italiano Franceso Arcuri, al que acusa de malos tratos.

Rivas, que se enfrenta a una petición fiscal de cinco años de cárcel, ha llegado al edificio judicial sobre las 9.45 acompañada por el abogado que después la ha dejado, su hermana y, entre otros, la asesora jurídica del Centro de la Mujer de Maracena, Francisca Granados, que inicialmente estuvo investigada en la causa.

Rodeada de una nube de periodistas se ha mostrado confiada en que la Justicia se pondrá de su parte y que seguirá «luchando». «Claro que soy inocente y se va a demostrar muy pronto», ha agregado.

El juicio está previsto en el Juzgado de lo Penal 1 de Granada. La Fiscalía solicita para Juana Rivas un total de cinco años de prisión por dos delitos de sustracción de menores y también pide que sea inhabilitada durante seis años para ejercer el derecho de patria potestad sobre los niños, de once y tres años.

El italiano Francesco Arcuri está personado en la causa como acusación particular y ha solicitado para Juana Rivas cinco años de prisión y ocho años de inhabilitación para ejercer la patria potestad sobre los niños. En concepto de responsabilidad civil, el padre de los menores reclama que su expareja le abone por los «daños materiales y morales ocasionados» una indemnización de 30.000 euros.

Actualmente él reside en Italia con los niños después de que Rivas se los entregara del pasado agosto y la previsión es que declare por videoconferencia si el juicio tiene lugar.

En paralelo, el Tribunal de Cagliari (Italia) tiene abierto un procedimiento civil para decidir sobre la guarda y custodia de los menores y ha culminado esta semana el proceso de periciales sobre los menores, los padres y la relación entre todos ellos.

Juana Rivas siempre ha alegado que se fue con sus hijos del domicilio familiar de Carloforte (Italia) para huir de una supuesta situación de maltrato a manos de su pareja. Arcuri fue condenado en 2009 por lesiones en el ámbito familiar, una sentencia que se dictó por conformidad de las partes, y en 2016 volvió a ser denunciado sin éxito por Juana Rivas en España.