Piden otro referendo a dos años del que votó por el «brexit»

Íñigo Gurruchaga LONDRES / CORRESPONSAL

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ANDY RAIN | Efe

La permanencia ganaría hoy por un 51,59 % contra un 48,5 %

24 jun 2018 . Actualizado a las 09:02 h.

Una manifestación en favor de un segundo referendo europeo recorrió este sábado Londres, agrupando a unas 100.000 personas, según los organizadores, tras banderas de la Unión Europea, pancartas similares a las de previas marchas -«brexit es racista», «Tengo 16 años y me habéis robado el futuro»- y coreando «¡Voto del pueblo!». Había sido convocada por People’s Vote, coalición de varias asociaciones opuestas a la marcha británica de la UE, para airear su petición de una segunda consulta sobre el acuerdo que alcancen Londres y Bruselas respecto a su futura relación.

La marcha recorrió la arteria política en el callejero de la capital británica, cuando se cumplen dos años del referendo que decidió, por mayoría de 51,89 % contra 48,11 %, que el Reino Unido se retire de la Unión Europea. Los sondeos dicen que la permanencia ganaría hoy por 51,5 % contra 48,5 %, un margen que no ofrece seguridad sobre el resultado de una consulta real, según los expertos.

Al final de la marcha, Vincent Cable, líder del Partido Liberal-Demócrata, que junto al pequeño Partido Verde apoyaba oficialmente la manifestación, se dirigió a los congregados frente al Parlamento británico señalando que no se puede asumir que habrá acuerdo entre Londres y Bruselas sobre los términos de la marcha británica y que el brexit puede evitarse. La colíder verde, Caroline Lucas, subrayó «el daño que ya está causando».

No existe apoyo mayoritario a la celebración de una segunda consulta entre las muestras de población consultadas. Un promedio de los resultados dice que en torno al 38 % la quiere y el 45 % la rechaza. Gente opuesta al brexit ha celebrado que una mayoría respondiese sí a la pregunta de una firma de encuestas que no mencionaba un segundo voto sino que «la última palabra» la tenga la población.

El enredo político

El profesor John Curtice, referencia nacional para el análisis de sondeos, ha reiterado en sus publicaciones recientes su diagnóstico sobre el tono vital de los británicos en torno al gran enredo político en el que se ha sumergido su país. La gran mayoría cree que no va a lograr un buen acuerdo con la UE, culpa de lo que ocurre a los políticos, reparte la responsabilidad de la mala negociación entre Londres y Bruselas.

Grandes empresas, como Airbus el viernes, advierten de que pueden marcharse del Reino Unido si no hay acuerdo. El sector del automóvil se reúne el martes en una gran cumbre, desde la que se emitirá el mensaje de preocupación en una industria con cadenas de producción integradas a escala europea. Ministros del Gobierno y May han reavivado la amenaza de retirarse de la negociación sin acuerdo.

Las propuestas británicas y la posición de principios del Consejo Europeo tienen en común la idea de un acuerdo de libre comercio que contemple bienes. El sector británico de servicios, que incluye a la City, está resignado a quedar sin pasaporte europeo. Son los pilares de la estructura quizás más aceptada en Londres para un futuro acuerdo. Pero requiere más pasos de Theresa May en las regulaciones comunitarias sobre bienes y el régimen del IVA. La división en el Gabinete británico ha ralentizado la negociación, que está acercándose al momento de mostrar si existe flexibilidad en ambas partes sobre libertad de movimientos y un sistema de arbitraje de disputas comerciales que no dependa exclusivamente de la jurisprudencia europea, para firmar un acuerdo cuyo proceso transitorio de implementación puede extenderse más allá de lo ahora previsto, en diciembre de 2020.

No, a una salida de «papel higiénico» 

Coincidiendo con el aniversario, algunos ministros defendieron el «brexit». Desde el diario The Sun, el titular de Exteriores, Boris Johnson, defensor de un «brexit duro», atacó incluso a Theresa May. Así rechazó un «brexit de papel higiénico», en sus palabras «débil, transigente y aparentemente infinito». El de Comercio, Liam Fox, y el del Brexit, David Davis, dijeron que también es una opción una salida sin acuerdo con la UE.