El perdón de Tsipras no basta para frenar la crisis política griega

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

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YANNIS KOLESIDIS | Efe

Aumentan las críticas al primer ministro mientras el país reza para que no haya más víctimas mortales

29 jul 2018 . Actualizado a las 09:33 h.

Seis días después de que Grecia viviera los incendios mas mortíferos de este siglo la cifra de muertos suma ya 88 y los equipos de rescate continúan rastreando viviendas en las zonas afectadas, ahora con la esperanza de no tener que hallar más cuerpos. La última víctima fue una mujer de 42 años que se encontraba entre los pacientes en estado crítico.

Desde hace dos días no ha habido nuevos hallazgos de cadáveres y la cifra de muertos se ha visto engrosada por el fallecimiento de personas en estado crítico.

Entre los cuerpos que sí han podido ser identificados se encuentran los de las gemelas de nueve años que toda Grecia llevaba buscando desde el martes, cuando su padre creyó haberlas visto vivas en un bote de pesca. Según los medios locales, los cuerpos calcinados formaban parte del grupo de más de una veintena de personas que quedaron atrapados por las llamas en un solar junto a dos complejos de vivienda, a tan solo 30 metros del mar que hubiera podido ofrecerles salvación.

Hasta el momento, los peritos han inspeccionado 3.505 viviendas afectadas por los incendios, de las cuales 998 han sido declaradas en ruina y 794 temporalmente inhabitables.

Aunque todavía no hay certeza absoluta de que los incendios fueran provocados, nadie duda de que los endémicos fallos urbanísticos en Grecia y, sobre todo, las construcciones ilegales sembradas en todo el país propiciaron que el número de víctimas fuera tan elevado.

Según datos ofrecidos por la Cámara Técnica de Grecia, el 52 % de las construcciones en la población de Mati son ilegales, algo que ocurre en muchos lugares de Grecia, donde se ha edificado sobre arroyos secos, en zonas forestales o en la misma arena de la playa. 

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El primer ministro, Alexis Tsipras, anunció un plan nacional para mejorar la protección contra incendios y acabar con este mal endémico. Pero ni ese gesto ni la petición de perdón le han bastado para frenar las críticas que llegan contra su deteriorada gestión desde todos los ámbitos, tanto desde la oposición como desde la sociedad civil. «El país está completamente desorganizado. Los fuegos son culpa de la falta de limpieza y de la mala coordinación de todas las fuerzas de emergencia», clamaban los vecinos de la zona cero de los devastadores incendios.

Como medida más inmediata el Gobierno decidió crear este mismo verano patrullas mixtas formadas por policías, bomberos y militares para mejorar la protección contra incendios.

El jefe del servicio de bomberos, Dimitris Stathópulos, afirmó en declaraciones a la cadena Skai que el jefe de la brigada desplazada al lugar de los incendios en Ática oriental había recomendado una evacuación, pero que esta no se llevó a cabo.

Dos tenientes de alcalde de la localidad anunciaron ayer su dimisión en vista de que no lo hacía el propio edil, Ilias Psinakis. Son las primeras víctimas políticas de la catástrofe, pero son muchos los que auguran que habrá más. Las peticiones de responsabilidades se multiplican.