El secretario general de Anfac mantiene que las cuotas de mercado seguirán cayendo
23 sep 2018 . Actualizado a las 09:38 h.La cuota de mercado del diésel está bajando en toda la UE, aunque en España el fenómeno va más acelerado, con un desplome de las ventas del 30 % en tres años. Mario Armero, el secretario general de Anfac, la patronal de las fábricas de coches implantadas en España, dice que probablemente estas cuotas de mercado seguirán cayendo, mientras otros países empiezan a recuperarla, y que su eficiencia es mayor. «Hay que hacer una reflexión importante al respecto», afirma.
-¿Qué supone para la industria del automóvil el nuevo impuesto al gasoil?
-Una mayor presión fiscal al diésel impacta directamente en la industria del automóvil, ya que puede reducir de manera drástica y muy acelerada la cuota de mercado de vehículos diésel. Esto afecta a la planificación de las fábricas, a la amortización de sus inversiones y a sus acuerdos con proveedores a medio plazo, poniendo en juego su competitividad.
-¿Esta subida es el golpe definitivo al mercado diésel de particulares?
-No vamos a matar tecnologías antes de tiempo. La solución al empeoramiento de la calidad del aire no pasa por poner fecha de caducidad a este tipo de vehículos, sino en hacerle frente eliminando los vehículos viejos que siguen circulando, que emiten hasta un 84 % más de óxido de nitrógeno (NOx) que un coche moderno diésel (normativa Euro 6). El problema no es el diésel, son los vehículos viejos.
-Con este panorama, convenza usted a un consumidor de clase media que necesita cambiar de coche, y que le dure bastantes años, para que se compre un modelo diésel.
-Pues debe saber que los vehículos diésel nuevos tienen su hueco en la movilidad actual y lo tendrán en el futuro. Todos los diésel que se venden actualmente (Euro 6) emiten un 84 % menos de gases contaminantes respecto a los de hace 15 años. Actualmente, tienen prácticamente las mismas emisiones de NOx que los de gasolina. Además, los vehículos diésel son más eficientes que aquellos, dado que consumen un 25 % menos de combustible y emiten menos CO2, hasta un 15 % menos.
-Sí, todo el mundo está de acuerdo en que los diésel que más contaminan son los más viejos. Pero ya no hay más planes PIVE para ayudar a achatarrar.
-Los resultados son visibles. Los planes PIVE de estímulo del achatarramiento convirtieron el mercado español en uno de los más eficientes de Europa, en términos de emisiones de CO2, pero esta tendencia se rompió en el 2017 y las emisiones de CO2 volvieron a crecer. Hay que revertir esta tendencia y desarrollar políticas industriales que apoyen la movilidad cero y de bajas emisiones.
-¿Qué plan le proponen los fabricantes a este Gobierno?
-Sería vital tener una estrategia nacional y un compromiso para el despliegue de la infraestructura que necesita la nueva movilidad (de cero y bajas emisiones). Y al mismo tiempo hay que trabajar en el marco regulatorio para flexibilizarlo, por ejemplo, con la figura del gestor de carga (de coches eléctricos o híbridos). De este modo, se estimulará la demanda del vehículo alternativo, sin duda.
