DIA aprueba nuevos cambios en su cúpula directiva para tratar de parar la sangría en bolsa

La Voz

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Oscar Vazquez

La cadena de supermercados se desplomó un 15 % y sus acciones valen ya cinco veces menos que hace un año

17 oct 2018 . Actualizado a las 19:58 h.

El grupo de supermercados DIA intenta atajar y pasar cuanto antes el delicado momento que atraviesa. Tras rebajar sus previsiones para el 2018, anunciar varios «ajustes» en sus cuentas del 2017 y llevarse un buen susto en bolsa, la cadena intenta ahora de darle la vuelta a la situación con un profundo lavado de cara en su cúpula. 

La debacle del valor de la compañía en bolsa continuaba este miércoles por tercer día consecutivo. El valor que más lastraba al Ibex 35 era Dia, cuyas acciones se dejaban un 15,04 % marcando mínimos históricos en su cotización. 

Los analistas miran ahora directamente al magnate ruso Mijaíl Fridman, principal accionista y una de las voces que más peso ha ido ganando en la compañía. Fuentes de la compañía aseguraban a la agencia EFE que durante estos últimos días se han producido varias reuniones entre los responsables de la compañía para tratar de analizar lo sucedido y lanzar un mensaje de tranquilidad y solvencia a sus accionistas; a pesar de que los números en bolsa no ayudan a la misión.

Mientras la tormenta bursátil arrastra los datos de la compañía, el mercado analiza con atención los mensajes que los directivos van enviando y espera con expectante la presentación de los resultados del tercer trimestre del año así como el nuevo plan estratégico previsto para los próximos meses.

Algunas de las fuentes próximas al principal accionista confirman que continuarán apoyando a la empresa, a la que consideran de gran «potencial» y explican que los tres consejeros propuestos a instancias suyas trabajan para aportar su experiencia en el sector. 

El último en incorporarse al consejo ha sido el brasileño Sergio Ferreira Dias, socio de la división especialziada en comercio del gigante LetterOne, fondo tras el que se encuentra el ruso Fridman y que controla el 29 % del capital de DIA. Ferreira se suma a los consejeros Stephan DuCharme y Karl-Heinz Holland. 

Los cambios no han sentado, por ahora, demasiado bien a la compañía, que tras los resultados conseguidos en la bolsa española vale ahora casi cinco veces menos que hace un año. La noticia de la suspensión del director financiero de la compañía, Amando Sánchez, lastraba todavía más las cifras y situaba las acciones por debajo del euro.

La salida de Sánchez se produce dos meses después del cese de Ricardo Currás, consejero delegado de DIA desde su escisión de Carrefour en el 2011 y encargado en su momento de la salida a bolsa de la firma de supermercados. Curras y Sánchez ejercían el papel de imagen de la compañía y su salida ha puesto sobre alerta a muchos de los accionistas.

No son los únicos cambios de peso que han tenido lugar estos últimos días. Este mismo miércoles se anunciaron algunos cambios más, como la creación una nueva dirección de Recursos Humanos para todo el grupo, o la decisión de que la dirección ejecutiva de DIA España aglutine todas las marcas bajo las que opera en el país. Además, una nueva secretaría corporativa unificará las áreas de jurídico, seguridad y control financiero.

La propia empresa aseguraba a la agencia EFE que el nuevo consejero delegado, Antonio Coto, arrancó hace semanas un «proceso de revisión» de la situación financiera de la empresa; un proceso que culminó con un sensible empeoramiento de las estimaciones para el 2018. Y es que si en un principio preveía una mejora de la rentabilidad para el presente ejercicio, actualmente los mandamás calculan una caída del Ebitda ajustado de entre el 30 y 40 %, a lo que se suma la decisión de poner en suspenso el reparto de dividendos. Explican que estos ajustes, DIA también tendrá que revisar los «estados financieros consolidados correspondientes al ejercicio 2017», lo que tendrá un impacto negativo en su patrimonio que rondará los 70 millones de euros.

Todo apunta a que la tormenta de DIA continuará, al menos, durante los próximos meses.