Cospedal defiende que las conversaciones entre Villarejo y su marido «no cambiaron nada» de los casos judicializados contra el PP

La Voz REDACCIÓN

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La exsecretaria general del PP alega que las filtraciones pretenden «cubrir» que miembros del Gobierno, en clara alusión a la ministra Delgado, negaron hasta tres veces conocer al comisario

29 oct 2018 . Actualizado a las 14:25 h.

La ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal ha restado hoy valor a las conversaciones mantenidas por su esposo, Ignacio López del Hierro, y el excomisario José Manuel Villarejo sobre casos judiciales vinculados al PP porque «no cambiaron nada» de lo que sucedió con estos asuntos.

La dirigente popular responde así a las informaciones publicadas por El Confidencial y el portal Moncloa.com, en las que se afirma que López del Hierro utilizó presuntamente al comisario Villarejo para conseguir información privilegiada de investigaciones contra la corrupción que afectaban al PP y evitar que otras causas prosperaran.

Según estas publicaciones, recogidas por Europa Press, grabaciones realizadas por el presunto cerebro de la operación Tándem, a las que han tenido acceso, revelan que López del Hierro habría actuado presuntamente como intermediario entre Génova y el comisario, y que este colaboró para torpedear las pesquisas de los casos Gürtel, Brugal y Umbra, que apuntaban de lleno a altos cargos populares.

Para Cospedal, sin embargo, «se trata de conversaciones en las que Villarejo cuenta a un particular lo que él considera que está ocurriendo con asuntos que se están conociendo en ese momento y que tienen que ver con personas vinculadas al PP». «Como es lógico y por la relación que tiene conmigo, esa persona recibe la información y pregunta acerca de ella pues puede ser un tema importante como luego se conoció», admite la ex secretaria general del PP. 

Sin embargo, precisa, como informa Europa Press, que «lo que está claro es que los temas de los que se habla están todos judicializados desde hace nueve años y esas conversaciones no cambiaron nada de lo que sucedió, ni por parte de Ignacio López de Hierro, ni por mi parte, secretaria general del PP».

Las comunicaciones tuvieron lugar entre junio y noviembre del 2009, pocos meses después de las primeras detenciones por esa trama y el comienzo de las investigaciones en torno a Luis Bárcenas. 

Insiste Cospedal en que se busca dar trascendencia a estas conversaciones que «no aportan nada a ningún proceso en marcha» por una razón. Y es la de «tratar de cubrir el hecho de que personas muy relevantes del actual Gobierno negaron hasta tres veces conocer al comisario Villarejo, cuando se ha evidenciado que no era cierto», en clara alusión a la ministra de Justicia, Dolores Delgado.

En los audios difundidos por el portal Moncloa.com, y que recoge Efe, se habla en clave: «Es que me preguntaba nuestra amiga.... Dice, oye mira a ver si tu amigo sabe por dónde van a ir estos», a lo que el excomisario responde: «Sí. Hay chicha, hay mucha chicha».

En otros audios, se oye a Villarejo que advierte de que hay quien está «largando cosas», e incluso ambos hablan del PSOE y de Alfredo Pérez Rubalcaba, entonces ministro del Interior en el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.