Una mujer muere de cáncer tras recibir un trasplante de pulmones de una fumadora

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

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La paciente, que sufría una fibrosis quística, desarrolló un tumor poco después de la intervención

04 nov 2018 . Actualizado a las 20:11 h.

Sufría fibrosis quística. Necesitaba un trasplante doble de pulmón. Lo consiguió. Parecía que volvía a respirar. Pero al poco tiempo de la intervención desarrolló un cáncer. Los pulmones que había recibido esta paciente francesa eran de una fumadora.

El caso lo recoge la revista estudio publicado en la revista especializada Lung Cancer en un estudio que alerta sobre el riesgo que entrañan este tipo de órganos. La mujer había sido tratada desde la infancia por fibrosis quística, según recoge AFP. Tras el rápido deterioro de sus funciones respiratorias, típico de esta enfermedad, los médicos decidieron en noviembre del 2015 realizarle un trasplante de pulmones. «Según la base de datos de donantes, los pulmones trasplantados pertenecían a una mujer de 57 años que había fumado un paquete de cigarrillos diario durante 30 años». Esa es la explicación que figura en el informe realizado por médicos oncólogos del hospital universitario de Montpellier. El estudio señala también que las pruebas realizadas en el momento de la muerte cerebral de la donante no revelaron anomalías.

En junio del 2017, la paciente, enferma, fue internada en la unidad de oncología torácica del hospital mencionado. Dos meses más tarde, murió de cáncer de pulmón. No había posibilidad de practicarle ninguna terapia.

Según el análisis médico del caso difundido por AFP, los síntomas corresponden a los de cáncer causado por tabaquismo. «El breve plazo entre el trasplante de pulmones y la aparición de la primera anomalía radiológica sugiere que la carcinogénesis comenzó en vida de la donante», añaden los autores del trabajo. Un cáncer cuyo crecimiento se habría acelerado enormemente por los tratamientos inmunosupresores que la paciente recibió para evitar el rechazo a sus nuevos pulmones.

Según el doctor Jean-Louis Pujol y sus colegas, «teniendo en cuenta el tiempo de latencia relativamente largo del cáncer de pulmón, sugerimos que los trasplantes de donantes fumadores, o que hayan dejado recientemente el tabaco, sean tratados con precaución».

Los médicos que realizaron el informe piden precaución con estos órganos