Así mató Ana Julia al pequeño Gabriel: «Le quité la mano de la boca y ya no respiraba»

J. P. REDACCIÓN

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El programa «Espejo Público» ha publicado el vídeo de la declaración en la que la mujer confiesa el asesinato del pequeño de 8 años

03 may 2019 . Actualizado a las 12:26 h.

Sin parar de llorar y muy nerviosa Ana Julia Quezada cuenta cómo terminó con la vida del pequeño Gabriel Cruz. El programa Espejo Público ha tenido acceso a la declaracón policial de la novia del padre del niño de ocho años.

«He perdido todo y yo no soy una asesina», así comienza la declaración de Ana Julia entre lágrimas y gritos. Manteniendo en todo momento que se trató de un accidente fue narrando lo que pasó aquel 27 de febrero. «Gabriel estaba ahí con un palito y le dije: ven, sube conmigo al coche que voy un momento a Roldaquilar y luego te traigo», entonces el niño de ocho años se alejó de la casa de su abuela con la novia de su padre. 

La mujer asegura que el niño que ya en la finca «yo estaba en el salón y entro a esa habitación y veo a Gabriel con un hacha. Pues le digo, "Gabriel dame el hacha que te vas a hacer daño". me dice, "¡No! No te la doy que siempre me estás mandado. Y yo no quiero que me mandes, que eres fea. Que yo quiero que dejes a mi padre. Que yo quiero que mi padre se case con mi madre y que te deje a ti. Que tienes la nariz muy fea, que yo no te quiero". Que no se qué», cuenta Ana Julia Quezada. Es entonces cuando confiesa el asesinato. «Yo le puse la mano en la boca y la nariz para que dejara de decir esas cosas, y de chillar, porque estaba chillando», asegura. «Cuando ya dejó de chillar y todo, le quité la mano de la boca. Y me acuerdo, sí, que cuando le quité la mano ya el niño no respiraba».

Después de esto la asesina confesa asegura que pensó en su pareja: «¡Qué le voy a decir yo a Ángel! Al padre de Gabriel, que le he quitado lo más grande que tiene. Entonces se me ocurre, veo un hacha por allí y pienso 'pues lo entierro aquí'», continuó narrando Ana Julia. 

Gabriel Cruz, de 8 años, desapareció el 27 de febrero y, durante doce días todo fueron incógnitas. La búsqueda implicó a centenares de efectivos de los cuerpos de seguridad y vecinos, amigos y familiares, entre ellos Ana Julia siempre al lado del padre del niño. El día 11 de marzo todo dio un giro inesperado: la Guardia Civil detuvo a la mujer y encontró el cadáver del niño en el maletero de su coche.

Dos días después Ana Julia confesó el asesinato ante la Guardia Civil y, desde entonces, la mujer de origen dominicano de 43 años se encuentra en prisión. Se le imputa la presunta comisión de delitos de asesinato, de detención ilegal y contra la integridad moral. Será juzgada por un jurado popular.