«#Cuéntalo»: 51.000 relatos de violencia machista

Tamara Montero
tamara montero SANTIAGO / LA VOZ

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Cerca de 800.000 personas se sumaron a la ola que en abril ayudó a las víctimas a sacudirse la culpa

14 dic 2018 . Actualizado a las 10:47 h.

«Con 20 años, pensaba que mi mamá era una loca exagerada por esperarme despierta cada vez que salía por la noche; luego me di cuenta que no era por miedo a que llegara borracha, sino a que no llegara nunca más a casa». Es uno de los casi tres millones de tuits que empezaron a recorrer Twitter el pasado mes de abril bajo una consigna: #Cuéntalo. Esa etiqueta levantó el pesado velo de la vergüenza a 40.000 mujeres, que relataron en primera persona cómo las habían acosado, agredido, tocado, violado. Otras muchas pusieron voz a las que ya no podían hablar porque no se atrevían o, simplemente, porque habían sido asesinadas. Son 11.000 relatos

En 14 días, el movimiento #Cuéntalo se convirtió en un espacio seguro conformado por 2,75 millones de interacciones en la Red, llegadas de 60 países diferentes, y en el que participaron 790.000 usuarios. El 38 % de las historias llegaron de España, y la estimación apunta a que unos 800 tuits fueron lanzados desde Galicia. Otro 30 % procedió de Argentina, el segundo país más activo. Gracias a la Asociación de Archiveros-Gestores de Documentos de Cataluña y el Centro Nacional de Supercomputación (BSC) ese espacio seguirá existiendo en proyectocuentalo.org, una web que a partir de la gestión del big data -se recogieron 13 gigas de información- permitirá conocer un poco más quién y de qué habla ese movimiento. Diez investigadores han clasificado manualmente 10.000 tuits para procesar los datos.

«Uno de cada diez tuits hablaba de asesinato». Es uno de los datos que más ha impresionado a Fernando Cucchietti, responsable del equipo de investigadores del BSC encargado del procesamiento y la visualización de datos. Uno de cada tres hablaba de acoso, un total de 18.000 mensajes, y uno de cada siete relataba una violación, tres de cada diez aludían a agresiones sexuales y uno de cada seis, a maltrato. Además, más de 3.000 tuits narraban agresiones a mujeres menores de 18 años y un millar, a niños de menos de 12 años.

Ha sido un movimiento anónimo. Cuatro de cada cinco mujeres que relataron violencias machistas tenían menos de 3.000 seguidores y esa es una de las principales diferencias con el movimiento #MeToo, que arrancó con mujeres famosas. Y precisamente eso, según explicó la periodista Cristina Fallarás, fue aprovechado por hombres para intentar restar legitimidad al movimiento, diciendo que otras mujeres se inventaban agresiones para parecerse a las estrellas.

A pesar de ser un movimiento fundamentalmente anónimo, el backlash también estuvo presente durante los 14 días en que las mujeres se sacudieron la culpa. Alrededor de 4.000 tuits eran en contra de la iniciativa, la mayoría hombres que se quejaban de que las mujeres se inventaban las agresiones.

Un plan para seguir profundizando en los datos

El Proyecto Cuéntalo tiene vocación de seguir profundizando en los datos que ha generado el movimiento en las redes sociales. Para ello están ya buscando financiación que les permita seguir clasificando de manera manual los tuits, ya que la tecnología actual no permite analizar automáticamente ciertas sutilezas. «Son muchos, pero no tantos como para que sea imposible», explicaba ayer Cucchietti. Eso permitiría, por ejemplo, conocer y clasificar la relación de víctimas y agresores y comprobar estadísticamente suposiciones que tienen ahora, como por ejemplo que los tuits lanzados desde América Latina contienen relatos de mayor violencia.