La primera iglesia de la república

Patricia Alonso ESTAMBUL

ACTUALIDAD

La comunidad sirio-ortodoxa construirá la primera iglesia cristina en la Estambul de Erdogan

21 ene 2019 . Actualizado a las 08:04 h.

A finales de los años 80, el distinguido politólogo Joseph Nye acuñó el término poder blando. La habilidad de un país para persuadir a otros sin necesidad de utilizar la fuerza bruta. La clave del éxito en el mundo político. Desde la llegada de Recep Tayyip Erdogan al poder, Turquía lo ha estado utilizando por vías de su poder islamista, construyendo mezquitas y financiando educación religiosa en América Latina, el África Subsahariana y los Balcanes.

En su propio territorio, la situación no es muy diferente. Nuevas mezquitas aparecen en cada barrio, y con ellas la prohibición de vender o consumir alcohol en sus alrededores. Quizá por ello resulta sorprendente la decisión, a principios de enero, de construir una nueva iglesia en Estambul. Y no una cualquiera. La primera iglesia jamás construida en tiempos de la República.

Bülent Kerimoglu, alcalde del distrito en el que se levantará el nuevo templo, y miembro del partido opositor republicano, calificó la decisión de «histórica». Él mismo hizo entrega de la licencia de obras al representante de la comunidad sirio-ortodoxa de Estambul.

Los primeros rumores sobre una nueva iglesia empezaron en enero del 2015, tras la reunión del entonces primer ministro, Ahmet Davutoglu, con representantes de las comunidades no musulmanas. El proyecto fue posteriormente aprobado por el Consejo de Monumentos de Turquía en mayo del

2016 y supuestamente debería de haberse iniciado en los meses posteriores.

Desafortunadamente para la comunidad sirio-ortodoxa, el 2016 fue un año convulso en Turquía, tras el intento de golpe de estado de julio de ese año y la posterior represión. El proyecto sufrió también retrasos derivados de una disputa entre la comunidad siríaca y sacerdotes católicos, que aseguraban que los terrenos dedicados al nuevo templo habían sido otrora un cementerio católico.

Finalmente, el Papa Francisco tuvo que intervenir, y lo demás es historia.

Según fuentes oficiales, las obras comenzarán en febrero y la construcción llevará al menos 18 meses. La nueva iglesia de la Virgen María Siríaca, con capacidad para más de 700 fieles, se emplazará en Yesilköy, un barrio cercano a la costa del mar de Mármara, y tendrá un coste de más de un millón de euros, en parte financiado por la comunidad.

Hasta ahora, la única iglesia siríaca en Estambul se encontraba en el céntrico barrio de Beyoglu, a pesar de que la mayoría de los fieles residen en los alrededores de Yesilköy. Por ese motivo, y teniendo en cuenta la magnitud de la ciudad y su terrible tráfico, muchos se veían obligados a acudir a iglesias católicas.

Según representantes de la comunidad, existen 25.000 cristianos siríacos en Turquía, de los cuales cerca de 17.000 residen en Estambul. El resto se encuentran en la provincia de Mardin, al sudeste del país.

Aunque el origen de la iglesia ortodoxa de Siria está en la región, las bajas cifras de fieles se entienden por las persecuciones de principios del siglo XX, que se cobraron cientos de miles de víctimas y forzaron a la mayoría de los seguidores de la iglesia a cruzar la frontera. El golpe de estado de 1980 y el terrorismo del PKK kurdo en la región terminó por desplazar a muchos más. Debido a la guerra en el país vecino algunos están retornando, principalmente a Mardin, donde en los últimos años la comunidad asiria ha ido en aumento.